El United Auto Workers (UAW) ha dado a Ford, General Motors (GM) y Stellantis un respiro de nuevas huelgas esta semana a medida que avanzan las negociaciones contractuales.  

El presidente de la UAW, Shaw Fain, informó que su sindicato estaba preparado para ampliar su huelga a una planta de GM que fabrica SUV de alto margen de ganancias en Arlington, Texas, pero llegó a un acuerdo de último con el fabricante automotriz para incluir a los trabajadores de la planta de baterías en un nuevo contrato laboral nacional. 

Los tres grandes de Detroit tienen empresas conjuntas con proveedores de baterías que no están contabilizadas en el contrato que expiró el mes pasado. 

Fain afirmó que GM ha acordado sentar las bases para una “transición justa” hacia la era de los autos eléctricos. 

Durante las operaciones del día, GM registraba una ganancia de 2.52% a 31.07 dólares en bolsa, mientras que Stellantis subía 3.10% y Ford, 0.76%.

GM y Ford habían experimentado fuertes caídas desde julio en medio de la incertidumbre sobre las negociaciones, mientras que Stellantis ha registrado un incremento cercano al 37% en lo que va de este 2023. 

El UAW ha estado intensificando constantemente las huelgas mientras los negociadores arreglan temas como los salarios, pensiones y futuros trabajadores de las plantas de baterías. Esta es la primera ocasión en tres semanas que la huelga no se amplía a más fábricas. 

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Trabajadores abandonan plantas

Hasta ahora unos 25,000 trabajadores sindicalizados han abandonado cinco plantas de ensamblaje y 38 instalaciones de distribución de repuestos desde que inició la huelga el pasado 15 de septiembre.

Esos trabajadores representan al menos una sexta parte de los miembros del UAW, lo que deja a su líder sindical con muchas palancas que accionan si quiere presionar a las empresas y sus cadenas de suministro.  

Por otro lado, la semana pasada Ford y GM presentaron nuevas propuestas al sindicato, que incluyen mejores salarios y beneficios de jubilación. 

La organización quiere salir de la huelga con al menos un incremento salarial del 30% frente a un aumento de 40% que pretendían al inicio. Es probable que la propuesta de Ford, que incluye un incremento salarial de 23% combinada con un subsidio por costo de vida, alcance el umbral esperado por el UAW. 

Asimismo, el sindicato busca que las pensiones tradicionales regresen; sin embargo, las compañías han señalado en repetidas ocasiones que no pueden cubrir esos gastos.

Esta es la primera ocasión en 88 años de historia del UAW que ha dirigido a los tres fabricantes de autos simultáneamente. Cada empresa está negociando por separado con la organización un nuevo contrato, pero están observando de cerca los movimientos de cada una y el sindicato está analizando las ofertas. 

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Con información de Bloomberg