Ántero Flores-Aráoz asumió este miércoles el cargo de primer ministro de Perú, un día después de que Manuel Merino asumiera la presidencia del país tras la destitución de Martín Vizcarra, quien fue denunciado por actos de corrupción por parte del Congreso.

Como jefe del gabinete de ministros en Palacio de Gobierno, aseguró que en su gestión se evitará medidas populistas para no mermar los esfuerzos en la recuperación económica del país minero.

“Vamos a cumplir con el cronograma electoral, reactivar la economía y darle la tranquilidad a la ciudadanía frente a la pandemia”, dijo en su cuenta de Twitter.

 

La tarea que enfrentará su gabinete se centrará en la “seguridad ciudadana, la pandemia, la economía y las elecciones”, expuso el funcionario.

Manuel Merino, que asumió el cargo el martes luego de que el Congreso destituyera de la presidencia a Martín Vizcarra por “incapacidad moral”, le tomó el juramento como primer ministro en una ceremonia realizada en el Palacio de Gobierno.

El gabinete ministerial que le acompañará será conocido en las próximas horas para juramentar hasta el jueves.

La designación de Flores Aráoz, un abogado de 78 años, marca el retorno al primer plano de este político socialcristiano e identificado con el ala dura del conservadurismo peruano.

Oposición logra quitar a Vizcarra de la silla  presidencial

Martín Vizcarra fue destituido como presidente de Perú el lunes pasado por el Congreso, en medio de acusaciones de sobornos cuando fue gobernador de una región peruana hace siete años.

Vizcarra, que enfrentó por segunda vez en menos de dos meses un juicio político en el Congreso, dijo que el quiebre de su mandato generaría inestabilidad política antes de las elecciones generales ya programadas para el 11 de abril.

 Lo peor que podemos hacer justo ahora es sumergir al país en un terreno de inestabilidad,

afirmó el exmandatario, tras negar las acusaciones de  haber recibido sobornos.

Vizcarra, de 57 años, se convierte así en el segundo presidente que deja el cargo durante este periodo gubernamental de cinco años, que comenzó en julio de 2016.

El exmandatario asumió el poder en marzo del 2018 tras la renuncia de Pedro Pablo Kuczynski, quien abandonó la presidencia acorralado por denuncias de corrupción, un flagelo en este país que ha afectado a sus últimos cuatro expresidentes.

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Temen políticas populistas

Analistas temen que el nuevo presidente, que debe completar la actual gestión gubernamental hasta julio del próximo año, promueva leyes consideradas populistas siguiendo el modelo del Congreso, que fue liderado por Merino.

“Estos eventos generan incertidumbre, que puede erosionar la confianza de los inversores y reducir la capacidad de implementar reformas”, dijo la agencia de calificación crediticia Standard & Poor´s, aunque agregó que las crisis no han dado lugar a cambios significativos en las políticas.

Al respecto, Fitch Ratings dijo en un informe el miércoles que el Congreso fragmentado ha generado inestabilidad y que el riesgo de acusaciones se convierte en la “nueva norma política” que pueden golpear los planes para reducir el déficit fiscal y el repunte de la economía post pandemia.

“Desafíos de gobernabilidad persistentes y percepciones de el debilitamiento de las instituciones también podría debilitar la recuperación de la economía el 2021”, señaló Fitch.