Los precios del petróleo se mantuvieron al alza por quinto día consecutivo, ya que los inversionistas apostaron que la variante ómicron del coronavirus solo tendría un impacto limitado en el crecimiento económico.

El West Texas Intermediate (WTI) subió 0.62%, a un precio de 76.04 dólares por barril. Mientras tanto, el Brent del Mar del Norte avanza 0.52%, cotizando a un precio de 79.01 dólares por barril, de acuerdo con Bloomberg.

Analistas indicaron que el incremento también ocurrió entre los bajos volúmenes de operaciones por las vacaciones de Navidad y Año Nuevo que aumentaron la volatilidad.

El aumento de los precios del crudo se apoyó en parte en reportes de que Reino Unido determinó no imponer más restricciones a la movilidad de los consumidores en Inglaterra a medida que aumenten las infecciones por COVID-19, aunque estaba revisando el impacto de la enfermedad en los hospitales.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos han reducido el periodo de aislamiento recomendado para las personas infectadas con COVID-19 a cinco días desde 10, mientras estudios preliminares recientes han sugerido que la variante omicron puede ser más transmisible pero menos severa que otras cepas de coronavirus.

Estos reportes se han interpretado como señales de que las grandes economías no contemplan confinamientos severo para contener la propagación del virus, a diferencia de lo sucedido al incio de la pandemia.

Sin embargo, algunos economistas ven la propagación del virus como un obstáculo para el crecimiento económico mundial. 

Mark Zandi, economista jefe de Moody’s Analytics, rebajó su pronóstico del Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos para el primer trimestre a 2.2% desde 5.2%, ya que “puede ver el aumento del daño económico en el primer trimestre”, informó The Wall Street Journal. 

De cara al futuro, los inversionistas esperan la reunión entre la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados (OPEP +), programada para el 4 de enero, en la que definirán si apegarse al plan de incremento gradual de producción.