Microsoft informó que en las últimas semanas detectó y frustró vulneraciones provenientes de Rusia, China e Irán, contra personas y organizaciones vinculadas con las elecciones presidenciales de Estados Unidos, donde compiten Dondald Trump y el demócrata Joe Biden.

La tecnológica advirtió que una de las principales firmas de asesoría de la campaña de Biden estaba en la mira de presuntos piratas informáticos rusos.

La empresa de Bill Gates reveló que los asesores de ambas campañas están en riesgo de espías digitales en medio de una de las elecciones presidenciales más convulsas en la historia reciente del país vecino del norte.

Tom Burton, vicepresidente de seguridad de clientes en Microsoft, dijo que el mismo grupo de atacantes rusos que intervino en las elecciones de 2016, trató de entrar en cuentas de consultores políticos que sirven tanto a republicanos como a demócratas, así como a organizaciones de defensa y centros de estudio el año pasado.

Añadió que también un grupo de piratas informáticos chinos persiguieron a personas “estrechamente asociadas con las campañas y candidatos presidenciales de Estados Unidos”, incluido un aliado anónimo de Biden y “al menos una persona prominente anteriormente asociada con el gobierno de Trump”.

También comentó que, otro grupo de origen iraní intentó iniciar sesión en cuentas pertenecientes a funcionarios del mandatario republicano y de miembros de su personal de campaña.

En junio pasado Google dio a conocer información sobre presuntos intentos de ataques cibernéticos a los equipos de campaña de ambos candidatos; en esa ocasión, la empresa señaló también a China y a Irán.

El anuncio fue hecho en Twitter por el jefe del Grupo de Análisis de Amenazas de Google (TAG), Shane Huntley, y es la más reciente indicación del espionaje digital enfocado de forma rutinaria a altos políticos.

Huntley dijo que no había signo de que alguna de las campañas hubiera sido comprometida.

Google no ofreció detalles más allá de los tuits de Huntley, pero la atribución es inusualmente pública, lo que representa un signo de lo sensibles que los estadounidenses se han vuelto al espionaje digital dirigido a campañas políticas.

Con información de Reuters y AFP