Facebook enfrenta una demanda colectiva por 150 mil millones de dólares por su presunta responsabilidad en el genocidio en 2017 de los musulmanes rohingyá en Myanmar, pues alegan que sus algoritmos amplificaron el discurso de odio en su contra, lo que propició los ataques.
La denuncia, presentada en una corte de California, sostiene que los algoritmos de la compañía estadounidense de Marck Zuckerberg promueven la desinformación y unas ideas extremistas que acaban traduciéndose en violencia en el mundo real.
Facebook es como un robot programado con una misión singular: crecer. La realidad innegable es que el crecimiento de Facebook, alimentado por el odio, la división y la desinformación, ha dejado cientos de miles de vidas rohingyás devastadas a su paso
, apunta el documento judicial.
Los rohingyas son esencialmente musulmanes y enfrentan una abierta discriminación en Birmania, donde se les ve como “extranjeros” a pesar de haber vivido en el país durante generaciones.
Antecedentes
Una campaña respaldada por el Ejército, y descrita por Naciones Unidas como un genocidio, expulsó a cientos de miles de ellos en 2017 hacia Bangladés, donde viven desde entonces en campos de refugiados.
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Asimismo, cerca de 10.000 más fueron asesinados por los militares. Del resto, algunos siguen en Birmania, donde no tienen derecho a la ciudadanía y donde son objeto de violencia y discriminación por la actual Junta militar que controla el país.
Las aulas en los campos de refugiados en Bangladesh han reabierto y los niños y niñas rohingya están felices de regresar a clases.
Todos los niños, sin importar quiénes sean o de dónde vengan, deben tener acceso a una educación de calidad. pic.twitter.com/muWGtLrpRZ
— UNICEF en Español (@UNICEFenEspanol) December 2, 2021
La queja
Esta demanda argumenta que los algoritmos de Facebook llevan a los usuarios más susceptibles a unirse a grupos cada vez más extremos, una situación que está “abierta a ser explotada por políticos y regímenes autocráticos”.
Los grupos de derechos humanos sostienen con frecuencia que Facebook no hace lo suficiente para prevenir la propagación de la desinformación.
Por su parte, sus críticos argumentan además que, incluso cuando la compañía fue alertada sobre la propagación de discursos de odio en su plataforma, no actuó.
¿De qué más se ha acusado a Facebook?
Esta demanda se convertirá en la segunda más importante contra la compañía, luego de que la exempleada Frances Haugen denunció hace unos meses a la empresa de Mark Zuckerberg por sus prácticas negligentes en seguridad.
Haugen demostró con miles de documentos internos que la red social también fue responsable de permitir la difusión de información falsa y la operación de grupos criminales, además de ser responsable de daños a la salud mental de las adolescentes debido al uso de Instagram.
