Nota de la editora: esta nota fue publicada originalmente el 25 de mayo a las 05:00 y actualizada el 1 de junio con el número de contagios por municipio
Tres de los cinco primeros tramos del Tren Maya ya fueron licitados, los cuales han iniciado el proceso de construcción en medio de la contingencia por el COVID-19. Ante las circunstancias, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) comienza a tomar cartas en el asunto.
La construcción del tren en los primeros tres tramos involucra a cuatro estados: Chiapas, Tabasco,Yucatán y Campeche, entidades donde el brote de COVID-19 continúa dispersándose.
La CNDH recomendó en días recientes al Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) que “de manera urgente suspenda las actividades no esenciales relativas al proyecto denominado ‘Tren Maya’, en favor de los pueblos originarios de la península de Yucatán.
Lo anterior como respuesta a las quejas presentadas por estos y organizaciones civiles defensoras de derechos humanos de la región.
“Manifiestan un inminente riesgo de contagio de Covid-19, por la implementación del proyecto denominado ‘Tren Maya’ durante la emergencia sanitaria declarada por el gobierno federal; quienes aducen la presunta violación al Derecho Humano a la Salud, la Integridad Personal y la Vida” indica la recomendación de Derechos Humanos.
Fonatur respondió que acataría las medidas y suspendería los trabajos no esenciales, sin embargo, la construcción continúa, amparada en el ‘Acuerdo por el que se establecen acciones extraordinarias para atender la emergencia sanitaria generada por el virus SARS-CoV2’, publicado el 31 de marzo, que considera los proyectos e infraestructura del gobierno federal como actividades esenciales.
“Es por eso que los trayectos Palenque-Escárcega, Escárcega-Calkiní y Calkiní-Izamal pueden continuar de manera normal, ya que corresponden a obras de reparación de la línea férrea existente y pueden considerarse como infraestructura crítica”, publicó Fonatur en un comunicado.
Estamos haciendo las cosas muy tranquilamente, no queremos exponer a nadie. Yo hable con la señora presidenta Rosario Piedra y le expliqué nuestra situación y le dije que cuenta con nosotros y que las recomendaciones las tomamos en cuenta y ya re-revisamos nuestros protocolos
dijo Rogelio Jiménez Pons director de Fonatur en entrevista con EL CEO.
Las medidas ampliadas incluyen la traducción de los protocolos de cuidado a lenguajes originarios. Y aunque se desarrollarán trabajos en Quintana Roo y Tabasco, estados que presentan riesgo de contagio, esperan no tener inconvenientes.
“En Tabasco, donde estamos, es en el extremo oriente y ahí no hay tanto problema, pero la zona poniente sí está muy afectada y eso nos tiene con mucha precaución, pero lo más importante es que estemos preparados y que las empresas también lo hagan poco a poco. Por ahora estamos empezando a armar los campamentos lentamente y con gente local”, dijo el funcionario.
Destacó que hasta el momento en la obra solo en la parte de los trabajadores del gabinete se movilizan más de 1,000 personas.
Tramos pendientes
De los cinco tramos que serán desarrollados por la iniciativa privada aún quedan dos pendientes. El cuarto será adjudicado a ICA de manera directa, pues la empresa posee la concesión de explotación y mantenimiento de la autopista por donde pasará el tren.
El acuerdo no ha sido formalizado todavía, sin embargo, se espera que tenga un costo de 26,000 millones de pesos, según comentó Jiménez Pons, monto que aunque es mayor a las otras propuestas ganadoras lo consideran una ganancia.
“Al principio ICA no quería pero ya lo aceptó. Ahí nosotros ganamos en tiempo y dinero”.
Aunque se trata del monto de mayor costo en relación con las propuestas económicas ganadoras de los procesos previos, lo consideran un ahorro pues se trata de un tramo de mayor longitud, destacó Jiménez Pons.
Sobre el quinto tramo esperan lanzar la licitación a principios de junio, en el que hay un participante que iniciará con ventaja: BlackRock.
El directivo destacó que el fondo planteó desde el 2017 un proyecto de transporte urbano entre Cancún y Tulum que no ha logrado consolidarse.
El proyecto del Tren Maya, además del transporte turístico y de carga, tiene entre Cancún y Tulum un tramo de transporte urbano pensado principalmente para la gente que hace ese viaje como parte de sus rutina laboral. Y aunque el tramo será licitado, BlackRock tendrá ventaja.
Se tiene que licitar y tienen que concursar, aunque tienen más o menos 10 puntos de ventaja, aparte del conocimiento técnico de la zona. Les da ventaja sobre las propuestas. Pero se va hacer la licitación y hay condiciones de competencia
