México y los mercados de Sudamérica son el nuevo foco de Carlos Slim tras la venta de su negocio de telefonía móvil virtual en Estados Unidos en plena pandemia por COVID-19, una coyuntura que, pese los estragos económicos globales, resultó favorable para América Móvil.

Al parecer el gigante de las telecomunicaciones encontró una muy buena coyuntura para desprenderse de esos activos y, más que un asunto de perspectivas de mercado, fue una buena oportunidad desde la perspectiva financiera, aseguró Víctor Pavón Villamayor, presidente de Oxford Competition Economics.

De hecho, el especialista considera que justamente la particular coyuntura de la contingencia sanitaria hizo que la oferta tuviera sentido corporativo y financiero, a pesar del impacto en varias economías del mundo.

El pasado 14 de septiembre, América Móvil dio a conocer la venta de Tracfone a Verizon, un negocio que presta servicio a 21 millones de suscriptores y cuyo precio de venta acordado está valuado en 6,250 millones de dólares.

Una parte de la operación se va a liquidar de inmediato, donde esencialmente América Móvil va a tomar acciones de Verizon, lo que significa que va a dejar de ser un operador como tal, pero con posición en una de las empresas de telecomunicaciones más grandes en Estados Unidos.

Al mismo tiempo, la compañía se mantiene cerca de Tracfone en el mediano plazo, lo cual también le beneficia como una prima adicional, un previo adicional, garantizando que ésta siga operando bien y eso hace más atractiva la operación para América Móvil.

Tracfone se posicionó como un jugador relevante en Estados Unidos al ofrecer un servicio de telefonía móvil bajo la figura de Operador Móvil Virtual (OMV), es decir a través de la red de un tercero que le permitió adoptar clientes principalmente migrantes en aquel país.

Aunque este nicho de negocio es de gran atractivo en Estados Unidos, una vez que se llega a saturar, como pasó con Tracfone, no hay más que un movimiento tendencial en el crecimiento de la población, añadió Pavón Villamayor.

Para el especialista, América Móvil llegó a ese punto en el que consideró que las perspectivas de crecimiento en ese nicho ya no eran de gran expansión, por lo que prefirió concentrarse en las operaciones de mayor rendimiento como los mercados de Sudamérica, principalmente.

La apuesta de América Móvil, como la de otros operadores, es dónde ponen su dinero: en mercados que sean atractivos y que estén en crecimiento, y que en el mediano plazo vayan a tener un buen reconocimiento, dijo Pavón Villamayor.

Evidentemente, en algunos mercados esto significa el desarrollo de redes más modernas que en el futuro van a ser una ventaja competitiva, que le van a permitir sostener ritmos de crecimiento más rápidos que su competencia, y eso tiene sentido para la empresa

Así, América Móvil se concentraría en las operaciones de Sudamérica y México, una empresa que tiene que valuar cada dólar que invierte y dónde tendrá un mayor rendimiento, una fórmula que vira hacia América Latina, mercados que siguen siendo muy atractivos y donde puede seguir invirtiendo.

Mercados como Brasil, Colombia y Argentina, por ejemplo, mercados en los que participa de manera más competitiva, contra un mercado ya de difícil crecimiento como lo es Estados Unidos.

Desde principios de 2019, América Móvil emprendió la venta de su negocio en Guatemala y El Salvador, aunque finalmente ésta última no se concretó por las condiciones que la autoridad reguladora de aquel país le impuso, por lo que a principios de septiembre la dio por terminada.

Además, en mercados como Argentina, que es de los más equilibrados en la región a nivel de participación de mercado de los jugadores, está pasando por un momento conflictivo luego de que Alberto Fernández, el presidente de aquel país, decretara congelar las tarifas de servicios telecom hasta fin de año.

En México América Móvil es el operador económico preponderante en telecomunicaciones y sigue en espera de que el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) realice la segunda revisión bienal que determine si las medidas simétricas aplicadas se refuerzan o no.