Pfizer no está preparada para publicar los resultados sobre la última etapa del ensayo de su vacuna experimental contra el COVID-19, que desarrolla junto a la alemana BioNTech.

La farmacéutica dijo que el regulador encargado de determinar si el ensayo ha sido exitoso o no todavía no realiza ningún análisis provisional sobre la eficacia de la vacuna.

El presidente ejecutivo de la compañía, Alberto Bourla, adelantó hace unas semanas que Pfizer publicaría en octubre los datos sobre la eficacia de la vacuna.

Las acciones de la empresa tienen un leve avance de 0.36%, a 38.06 dólares por papel, a las 11:00 am (hora de CDMX).

El propio presidente de Estados Unidos, Donald Trump, comentó que esta vacuna podría estar disponible antes de las elecciones del 3 de noviembre, pero en las últimas semanas su equipo tuvo que aclarar que el proceso de inmunización recién podría empezar -como mínimo- a fines de año.

No obstante, Pfizer confía ser la primera farmacéutica estadounidense en reportar datos positivos sobre la última etapa de ensayos de una vacuna contra el virus, por delante de su rival Moderna.

Pfizer y BioNTech iniciaron su ensayo clínico de fase 3, con 44,000 candidatos, a finales de julio.

La junta que monitorea los datos de los ensayos tiene previsto realizar su primera evaluación sobre el desempeño de la vacuna, luego de que 32 participantes del estudio se infectaron de COVID-19.

El inversionista del sector de salud Brad Loncar dijo que era difícil sacar conclusiones de este ensayo porque aún no había pasado por el primer análisis interno.

“Creo que esto implica que la tasa general de infección es mucho menor de lo que Pfizer inicialmente estimó. Así que el ensayo está desarrollándose algo más lento de lo que se esperaba”, comentó Loncar.

Pfizer ha dicho que sus ensayos tienen éxito, solicitará el permiso para uso de emergencia de la vacuna a los reguladores estadounidenses poco después de contar con todos los datos de seguridad de pacientes, a fines de noviembre. Espera estar lista con los datos de manufacturas de las dosis para la revisión de las autoridades antes de esa fecha.

La compañía reportó el martes una caída del 4.3% en sus ventas trimestrales, golpeada por la creciente competencia de su medicamento Lyrica, que ya no está sujeto a patentes, y por una menor demanda de algunos de sus tratamientos durante la pandemia del COVID-19.

En el tercer trimestre, Pfizer dijo que las ventas de Lyrica cayeron 3% a 352 millones de dólares. La facturación total de la farmacéutica estadounidense se redujo a 12,130 millones de dólares desde los 12,680 millones de dólares del mismo periodo de 2019.

Con información de Reuters