Petróleos Mexicanos (Pemex) se acerca cada vez más al territorio basura ante los problemas financieros que muestra la compañía y por el aumento en la dependencia con el gobierno, de acuerdo con la calificadora de riesgo Moody’s. 

La tarde del 9 de febrero, Moody’s dio a conocer que rebajó la calificación de Pemex a B3 desde B1, misma que indica que la compañía tiene una capacidad de pago débil con relación a otros emisores locales. Además, mantuvo la expectativa negativa.

Moody’s considera que Pemex aumentará la dependencia con el gobierno “a menos de que se lleve a cabo una reforma estructural en la estrategia de negocio, los indicadores crediticios y la generación de flujo de efectivo de Pemex sufrirán un mayor deterioro en los próximos tres años”. 

La agencia también realizó una Evaluación de Crédito de Referencia y rebajó a ‘ca’ desde ‘caa3’, lo que indica que sería probable que la petrolera mexicana incumpla sin el respaldo del gobierno local. 

Pemex con mayor dependencia

Moody’s anticipó que Pemex tendrá que incrementar la dependencia a la financiación externa para contrarrestar el flujo de caja libre negativo. Además, estima que las condiciones fiscales del gobierno se verán mermadas este año.

“Este deterioro se debe a un aumento considerable del déficit, impulsado por el gasto social, costos de endeudamiento persistentemente altos y gastos elevados en proyectos emblemáticos”, explicó en el documento.

Dentro de las preocupaciones de Moody’s se contempla el vencimiento de 13,700 millones de dólares en 2026, una disminución del flujo de efectivo operativo a causa de la expansión de su negocio de refinación que genera pérdidas, las cuales fueron de unos 31,500 millones de dólares entre 2019 y 2022.

La petrolera más endeudada del mundo

El presupuesto de este año contempla el mayor déficit desde 1988, impulsando el gasto en programas sociales y grandes proyectos de infraestructura para consolidar su gobierno en el último año.

Pemex, la petrolera más endeudada del mundo, ha incrementado la deuda en cerca de 106,000 millones de dólares, de acuerdo con Bloomberg. Además, ha padecido los retrasos en la emblemático proyecto de López Obrador generando retrasos y con desplomes en las ganancias. 

El presidente mexicano ha estado brindando apoyo a Pemex en forma de recortes de impuestos e inyecciones de capital, que no han revertido el declive financiero de la compañía.

Con información de Bloomberg

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