La nueva aerolínea de carga que contará con el respaldo del presidente Andrés Manuel López Obrador, inversionistas y posiblemente operada por los trabajadores de la extinta Mexicana de Aviación se topa con una pared más: la competencia desleal que generaría su despegue.

Al tener un componente estatal en su estructura operativa, el gobierno podría subsidiar algunos de los costos de operación de la empresa, lo  que generaría precios por debajo de lo que ofrecen otras aerolíneas.

La operación de la aerolínea implicaría que el Estado pueda subsidiar, aportar beneficios que, competitivamente serán cuestionados por otras aerolíneas tanto nacionales como internacionales

dijo Pablo Casas Lías, director del Instituto Nacional de Investigaciones Jurídico Aeronáuticas.

Además, al momento de que una nueva línea aérea nace, se le otorga una serie de prórrogas por algún tiempo, según Ximena Garmendía, fundadora del blog especializado Sobrecargo Informa.

Hasta el momento esa aerolínea es un proyecto y en caso de contar con apoyos gubernamentales, tendrían que aplicarse al resto de la competencia. De otra forma habría una competencia desleal

comentó Fernando Suárez, analista aéreo.

El otorgar apoyos a una empresa a través de subsidios, implica que los contribuyentes serán los que financien los costos de la nueva aerolínea.

Añadió que los apoyos serían en forma de créditos; pago de combustible; exenciones de algunos pagos de impuestos como el de aeropuertos; mayores plazos de pago en servicios aeroportuarios y aeronáuticos como radares, sistemas de aterrizaje y otros.

López Obrador ha manifestado en diversas ocasiones sus intenciones de revivir a Mexicana de Aviación. A finales del mes pasado el mandatario sostuvo una reunión con funcionarios y con Salvador Álvarez, director general de Altán, quien fue como representante de inversionistas interesados en el proyecto.

Nueva aerolínea de AMLO suma problemas antes de despegar

La entrada en operaciones de la aerolínea mixta con posibles subsidios representaría un golpe a la industria en plena recuperación, luego de su peor crisis en la historia.

Al primer semestre del año, la aviación de pasajeros estaba al 66.4% de sus niveles prepandemia. En contraste, el de carga estaba al 90% de sus niveles de 2019, revelan datos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).

Entre las cargueras más afectadas con la decisión estarían Grupo Aeroméxico, Mas Air, Aeronaves TSM y Aerounión.

 

México y su historia con las aerolíneas estatales

En el país han existido aerolíneas bajo esquema estatales, sin que hasta el momento sobrevivan ninguna de ellas. Tal es el caso de Mexicana de Aviación y Aeroméxico.

Ambas nacieron como empresas privadas, pero en el gobierno de José López Portillo (1976-1982) se estatizaron ambas firmas.

Para 1988, Carlos Salinas decidió venderlas, como parte de su programa para privatizar buena parte de la industria nacional. No obstante, en el caso de Mexicana, quebró y con la entrada del Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa) se exacerbaron los problemas.

Para que las aerolíneas no dejaran de operar, se modificó su estructura al crear una controladora pública, bajo el nombre de CINTRA. Luego en 2005, se venden a particulares ambas compañías. Cinco años después Mexicana voló por última vez y entró en proceso de concurso mercantil.

CINTRA funcionaba bajo un esquema de controladora y más que apoyos a las aerolíneas eran condonaciones de deuda que arrastraban de cuando eran privadas, lo que significaba un cargo al erario

dijo Suárez.

Emirates, otro precedente

En 2019, Aeroméxico fue a los tribunales para evitar la entrada de Emirates al mercado nacional. La empresa área de Medio Oriente buscaba operar la ruta Dubái-México con escala en Barcelona con vuelos diarios, suponiendo una afectación directa para la mexicana que controlaba la ruta entre México y España.

En ese momento la empresa comandada por Andrés Conesa argumentaba una competencia desleal, pues Emirates contaba con subsidios por parte de los Emiratos Árabes Unidos que permitía manejar precios más bajos.

Al final la batalla legal fue en favor de la emiratí, bajo el recurso del derecho aeronáutico conocido como quinta libertad del aire. Esta le da derecho a una aeronave de un país “A” a embarcar pasajeros, correo y carga en un país “B” y transportarlos hasta un país “C”.

De acuerdo a declaraciones de Aeroméxico, era la primera vez que se aplicaba la quinta libertad en una ruta que ya era operada por una aerolínea nacional.  Emirates inició sus vuelos en México en diciembre de 2019.