Un tribunal de Tokio autorizó este jueves la liberación bajo fianza del expresidente de Renault-Nissan, Carlos Ghosn, en la cárcel desde principios de abril tras de ser detenido de nuevo.

La fiscalía apeló inmediatamente, considerando lamentable que el tribunal haya autorizado su liberación pese a los temores de destrucción de pruebas, según un comunicado del fiscal adjunto.

Carlos Ghosn, de 65 años, ya había saldado una importante suma para obtener el derecho de salir el 6 de marzo del centro de detención de Kosuge, en el norte de Tokio, tras 108 días de prisión consecutivos después de su arresto inicial el 19 de noviembre. Esta vez el pago de la fianza fue de 4.5 millones de dólares.

El expresidente de Renault-Nissan apareció en aquella ocasión disfrazado con una gorra azul, un uniforme de obrero, gafas y una máscara de protección blanca, un atuendo que le convirtió en el hazmerreír de los medios. Su intención, en cambio, era pasar inadvertido.

El abogado que ideó esta escena tuvo que pedir disculpas por este ‘fracaso’ que empañó la reputación de su cliente.

‘Insuficiencia renal’

Los motivos de su puesta en libertad no fueron divulgados, pero los abogados de Ghosn resaltaron un problema médico.

“Sufre una insuficiencia renal crónica y hemos detallado este dato en nuestra solicitud”, explicó a principios de esta semana su principal defensor, Junichiro Hironaka.

El ex-CEO será sometido a estrictas condiciones: detención domiciliaria, prohibición de salir de Japón y otras condiciones para impedir destrucción de pruebas y fuga, precisó el tribunal.

Solo podrá ver a su esposa “a condición de que el tribunal apruebe una solicitud”, explicó Hironaka a la prensa. Carole Ghosn está en la mira de la fiscalía por su supuesto rol en uno de los elementos del caso y por haber contactado a protagonistas del mismo.

Durante su anterior liberación, Carlos Ghosn pudo ver a su familia en un apartamento alquilado en Tokio del que no podía ausentarse más de tres días. Volverá a la misma vivienda, según su abogado.

La última acusación en su contra, presentada el lunes pasado por abuso de confianza agravado, parece cerrar las investigaciones de la fiscalía.

‘Críticas a la justicia’

El empresario franco-libanés-brasileño es objeto de cuatro cargos por diversas malversaciones financieras, como la disimulación de ingresos en documentos bursátiles y dos casos diferentes de abuso de confianza agravado.

El último, que parece el delito más grave para los expertos, se refiere a la transferencia de 5 millones de dólares procedentes de Nissan a un distribuidor de vehículos en Omán que habrían sido utilizados para enriquecimiento personal, según la oficina de la fiscalía.

Ante lo que él califica de “ensañamiento judicial”, Ghosn usó varias formas -entrevistas con algunos medios, comunicados, comparecencias a petición suya ante un tribunal- para clamar su inocencia y denunciar un “complot” contra él por Nissan.

En un video reciente, grabado la víspera de su segunda detención el 4 de abril, pero publicado unos días más tarde, insistió en la idea de la trampa tendida por los dirigentes del grupo japonés para precipitar su caída y detener el proceso de fusión Renault-Nissan que preparaba.

Carlos Ghosn ahora podrá dedicarse activamente a la preparación de su juicio que no se celebrará hasta dentro de varios meses.

Con información de AFP