El pesimismo de los directivos empresariales de los sectores más importantes del país sobre la situación económica del país y de sus empresas continuó durante marzo pasado, extendiendo la racha negativa a tres meses.
De acuerdo con datos desestacionalizados del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el Indicador de Confianza Empresarial (ICE) se ubicó en 54.81 puntos, de 100 posibles, en el tercer mes de 2024.
Este nivel representó una caída de 0.31% respecto a febrero previo, siendo la tercera disminución consecutiva, es decir, la desconfianza de los directivos empresariales persistió en los primeros tres meses de este año.
El pesimismo de la iniciativa privada se da en medio de la incertidumbre que generan las próximas elecciones, aunque, según Banco de México, también se consideran como obstáculos económicos la inseguridad pública, la corrupción, la falta de estado de Derecho, la ausencia de cambio estructural en el país y la impunidad.
Sólo cae servicios
De los cuatro sectores económicos del ICE, solamente el referente a servicios privados no financieros se contrajo en marzo pasado, con una baja de 1.63% a tasa mensual, la segunda al hilo.
Este sector contribuye con 46% del Indicador de Confianza Empresarial, siendo el de mayor peso e incidencia en su comportamiento.
Al interior de servicios privados no financieros, tres de sus cinco componentes descendieron, resaltando con la caída más pronunciada el correspondiente al momento adecuado para invertir (7.93%), lo que significa que los directivos opinan que la coyuntura actual no es la idónea para inyectar capital.
Sobre los otros tres sectores, las alzas se dieron por un efecto rebote (baja base de comparación). Por ejemplo, el ICE de la construcción creció 4.24%, tras un desplome de 5.47% en febrero previo.
En tanto, a los aumentos en manufactura (0.07%) y comercio (0.55%) les precedieron dos meses seguidos con disminuciones, cada uno.
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