Si bien la inflación del productor en México alcanzó mínimos de hace ocho años, todavía hay actividades económicas que se encuentran en niveles altos, como las referentes a los alimentos.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el Índice Nacional de Precios Productor (INPP) creció 0.11% a tasa anual durante mayo pasado.
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Este resultado significó presentar la menor variación de los precios desde mayo del 2015, cuando se ubicó en 0.04%.
Además, la inflación del productor consiguió registrar 13 meses consecutivos con una tendencia de desaceleración.
Influencia de energéticos
La menor presión que muestran los precios al productor en el país se debe, principalmente, a la cotización del petróleo.
De hecho, las caídas más pronunciadas en el INPP se dieron en extracción de petróleo y gas (45.91% anual) y fabricación de productos derivados del petróleo y del carbón (24.33%).
Esto es de suma importancia ya que es bastante evidente que la disminución en la inflación se debe a factores que están fuera del alcance de la política monetaria, como las variaciones en precios de energéticos y otros commodities
detalla Banco Base.
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Mientras para Ve por Más (BX+), la desaceleración de los precios al productor derivó de la menor cotización de materias primas, la reducción en costos logísticos y la apreciación del peso.
Presión elevada
Sin embargo, algunos sectores económicos continúan presionados por los altos costos que todavía presentan.
Las dos actividades económicas que mostraron tasas anuales de doble dígito durante mayo pasado fueron industria alimentaria (10.41%) y servicios de preparación de alimentos y bebidas (10.22%).
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Otros incrementos importantes se observaron en la industria de las bebidas y del tabaco (9.93%), el suministro de agua y suministro de gas por ductos al consumidor final (9.70%) y servicios de alojamiento temporal (9.12%).
Lo anterior significa que los productores de dichos sectores todavía resienten la presión de costos, situación que si se mantiene, podría afectar al consumidor final.
Al respecto, Banco Base recalca que particularmente preocupa la persistencia de presiones al alza en la industria alimentaria y la de bebidas y tabaco, que inciden con rezago sobre el componente subyacente de la inflación al consumidor.
