Durante el segundo mes de 2025, las principales preocupaciones de los hogares mexicanos son: el comportamiento de la inflación, la dinámica del empleo y salir de vacaciones.
De acuerdo con datos desestacionalizados del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), de los 10 índices complementarios del Indicador de Confianza del Consumidor (ICC), siete registraron caídas anuales en febrero pasado.
La caída más pronunciada se presentó en el indicador correspondiente al comportamiento de los precios en el país en los siguientes 12 meses, con una baja de 6.2% respecto al mismo mes del año anterior, hilando dos disminuciones consecutivas.
En febrero, la inflación anual se ubicó en 3.77% en febrero, y si bien se mantuvo por segundo mes dentro del rango de Banco de México, de 3% +/- un punto porcentual, fue superior al resultado del mes previo.
Fotoarte: Natalia Montiel
Perspectivas de los hogares, en descenso
La segunda mayor disminución se dio en el comportamiento del empleo en los próximos 12 meses, con un descenso anual de 5.5%, siendo la tercera disminución consecutiva.
En este punto, el mercado laboral del país siguió con una tendencia de debilidad, pues la generación anual de 141,121 empleos formales en febrero pasado fue la menor creación desde la pandemia.
En tanto, el tercer retroceso más profundo en los indicadores complementarios del ICC se observó las posibilidades económicas para salir de vacaciones duranre el próximo año, de 4.6%, tras 25 meses seguidos con alzas.
Los otros complementarios
Las otras contracciones durante febrero pasado fueron en los indicadores referentes a la situación económica personal, tanto presente como futura; las posibilidades actuales de comprar ropa, zapatos, alimentos, y las condiciones económicas para ahorrar dentro de 12 meses.
Al otro extremo, el mayor incremento se exhibió en la planeación del hogar sobre comprar, construir o remodelar una casa en los próximos 2 años, con una variación de 17.4%.
Para Monex, la debilidad económica del cierre del 2024 se trasladó al inicio del presente año, por lo que el sentimiento económico de los consumidores conserva señales de deterioro.
Persiste un clima de incertidumbre en la situación económica del país, de los hogares y personal. Mermando sus expectativas hacia el futuro del: mercado laboral y ahorro y estableciendo una sensación de cautela en sus planes de compra. Por su parte, la trayectoria de inflación ha mostrado ligeras presiones en los precios, lo cual deja menor holgura en la cartera de las familias para el consumo
detalla el grupo financiero.
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