Los temores de salida del euro debido al endeudamiento que provocó el impacto de la pandemia del nuevo coronavirus pueden aumentar en los mercados si no se toman medidas para limitar la carga de la deuda, advirtió este martes el Banco Central Europeo (BCE).

“Si las medidas tomadas a nivel nacional o europeo fuesen juzgadas insuficientes para preservar la viabilidad de la deuda (en algunos países), la evaluación de los mercados del riesgo de redenominación (salida del euro, ndlr) podría aumentar aún”, indica un informe semestral de la institución sobre la estabilidad financiera.

Se prevé que los niveles de endeudamiento en los países de la zona euro aumenten entre 7% y 22% en 2020, incrementando la proporción de deuda pública respecto al Producto Interior Bruto (PIB) de la región de 86% en 2019 a cerca de 103% en 2020, explica la institución.

Normalmente, la zona euro busca limitar la deuda pública a 60% del PIB, aunque esta regla, que figura en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento europeo (PEC), fue suspendida a causa de la pandemia.

Tras dos dos meses de confinamiento, la pandemia paralizó la economía y los países europeos presentaron en las últimas semanas programas de ayudas por cientos de miles de millones de euros, que serán financiados principalmente a través de créditos.

El BCE no cuestiona esos planes de apoyo y reconoce que sin ellos, el costo económico y el impacto en el mercado habría sido más duro.

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En paralelo, el instituto monetario decidió aumentar sus compras de deuda pública y lanzar un plan de emergencia frente a la pandemia, con un volumen de más de 1 billón de euros para 2020.

Esto permitió “impedir que se profundizaran las diferencias en las tasas” de interés de la deuda pública dentro de la zona euro, entre la de Alemania (que sirve de referencia) y las de los otros países.

Asimismo, el BCE buscaba tranquilizar a los mercados, nerviosos por la bajada de actividad y el aumento del déficit presupuestario en países como España e Italia.

Sin embargo, una contracción económica más prolongada en la Unión Europea haría que la relación entre deuda pública y PIB acabara en “una trayectoria insostenible en los países endeudados”, advierte la institución.

Además, los países podrían tener dificultades para financiarse en los mercados “si los inversores consideran que la viabilidad de [su] deuda pública se ha deteriorado” y exigen réditos más altos.

La Comisión Europea propondrá el miércoles un plan de recuperación que podría alcanzar 1 billón de euros para superar la crisis causada por el coronavirus.

No obstante, las negociaciones se auguran difíciles entre los europeos: Francia y Alemania defienden su proyecto para evitar que las tasas de deuda pública italiana y española se disparen, protegiendo a esos países con un sistema de préstamos europeo, mientras que cuatro países -incluyendo a Austria y Holanda- son hostiles a que la deuda se mutualice.