La Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) abrió una investigación a la unidad estadounidense de Volkswagen por su supuesta broma de cambio de nombre a ‘Voltswagen’, dijo a Reuters una fuente cercana.

La investigación y la solicitud de la SEC para obtener información sobre el problema fue realizada a principios de abril. De acuerdo con Reuters, Volkswagen declinó comentar sobre el asunto y la SEC no respondió a una solicitud de comentarios.

El 30 de marzo, varios medios reportaron que Volkswagen publicó por error un comunicado sobre su cambio de nombre a “Voltswagen of America” y algunos ejecutivos de la automotriz confirmaron el cambio de nombre como parte de la acción de marketing.

El cambio de nombre se hizo viral en redes sociales e impulsó las acciones, sin embargo, un portavoz de la automotriz dijo a The Wall Street Journal que se trató de una broma como parte del April Fool’s Day, o Día de los Inocentes, que se celebra el 1 de abril tanto en Estados Unidos como en Alemania y otros países de Europa.

El objetivo de la compañía era que los usuarios hablaran sobre el lanzamiento del modelo ID.4, el primer vehículo eléctrico que Volkswagen lanza en Estados Unidos y que saldrá a la venta en el verano de este año, detalló la fuente al medio especializado.

La broma causó confusión entre los inversionistas y  provocó un salto en las acciones; en la bolsa de  Fráncfort cerraron ese día en 316.80 euros, un avance de  10.77%. 

Al día de hoy de acuerdo con Bloomberg cotizaba en 218.05 euros antes del cierre de mercado. 

La última vez que la fabricante estuvo bajo investigación fue en 2015, cuando admitió que utilizó un software ilegal para manipular las pruebas de emisiones de los motores diésel en Estados Unidos, lo que provocó la mayor crisis corporativa de Alemania y le costó al fabricante de automóviles más de 32,000 millones de euros en multas, reparaciones y costos legales. 

Apuesta sobre conducción autónoma

Volkswagen anunció que planea diseñar y desarrollar sus propios chips de alta potencia para vehículos de conducción autónoma, junto con el software requerido, dijo a un periódico alemán el CEO, Herbert Diess.

“Para lograr un rendimiento óptimo a la luz de las altas demandas que existen para los automóviles, el software y el hardware deben salir de la misma mano”, dijo Diess a Handelsblatt.

Volkswagen no planeaba construir semiconductores, pero le gustaría poseer patentes, dijo Diess, quien agregó que la unidad de software del grupo, Cariad, desarrollaría el conocimiento y lo expandiría.

La medida es una respuesta a Tesla, que puede integrar chips de diseño personalizado, lo que permite a la empresa estadounidense desarrollar nuevas funciones más rápido que sus competidores.

“Apple y Tesla tienen mayor competencia en términos de cómo se definen los semiconductores”, dijo Diess.

La alemana Daimler dio a conocer un acuerdo con Nvidia el año pasado para desarrollar y equipar sus automóviles Mercedes-Benz con una plataforma de software y chips de próxima generación.

Con información de Reuters