Google informó a sus empleados que quienes no cumplan todavía con la política de vacunación contra COVID-19 perderán su sueldo y serán eventualmente despedidos, según documentos internos de la compañía a los que ha tenido acceso la CNBC.
La empresa tecnológica remitió una circular a sus más de 150,000 empleados en Estados Unidos para que se vacunen, trabajaran o no de forma remota.
Además, los trabajadores tenían hasta el 3 de diciembre para probar su condición de vacunado o demostrar exenciones médicas o religiosas antes de que venciera la fecha.
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Sin embargo, quienes no subieron el estado de vacunación o no están vacunados, así como aquellos cuyas solicitudes de exención fueron rechazadas tendrán en lo sucesivo un plazo que vence el 18 de enero para cumplir con las reglas.
Tras esa fecha, quienes no hayan cumplido con la política de vacunación serán retirados de su puesto de trabajo con su nómina intacta durante 30 días.
Los trabajadores se oponen
Si siguen sin dosis de los fármacos contra el COVID-19, la compañía les retiraría de empleo y sueldo hasta seis meses. Transcurrido ese plazo, su contrato con Google terminaría.
Por lo menos, 600 trabajadores de Google (menos del 0.5% de su plantilla) se oponen a este mandato.
El gobierno de Estados Unidos, encabezado por el presidente Joe Biden, ordenó a las empresas con 100 o más trabajadores que se aseguren de que sus empleados estén completamente vacunados o se sometan a pruebas periódicas para detectar COVID antes del 18 de enero.
Mientras la variante ómicron vuelve a despertar dudas sobre el fin del home office para las grandes tecnológicas, Google ya anunció que en algún momento de 2022 los trabajadores deberán presentarse tres días a la semana en oficinas.