Será progresivo el impacto de la medida del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de aplicar aranceles del 25% a las importaciones mexicanas. Alcanzará su punto crítico en un plazo de ocho meses con la posible salida de empresas del país, de acuerdo con Waldo Fernández González, presidente de la Comisión de Seguimiento a la Implementación y Revisión del T-MEC en el Senado.
En entrevista con EL CEO, Fernández González precisó que dicha Comisión realizó un análisis sobre las consecuencias de esta política sobre la economía mexicana. El efecto inmediato en el país sería prácticamente nulo, mientras que en Estados Unidos se reflejaría en una presión inflacionaria.
“Cualquier producto va a aumentar 25% de precio, porque con los aranceles se va a trasladar ese costo al consumidor”, explicó el legislador, advirtiendo que dicho aumento podría generar descontento entre los consumidores estadounidenses.
No obstante, en el caso de México, los efectos comenzarían a sentirse en el sexto mes, y en el octavo mes ya se observaría un deterioro, incluyendo el traslado de líneas de producción de empresas hacia otros países, así como la salida de inversiones.
Tú no puedes cambiar una línea de producción de un día para otro. Tendrías que subir el costo de tu producción tras dárselo al consumidor norteamericano y estas empresas que operan en México tendrían que empezar a buscar la posibilidad de mejorar sus condiciones de producción tal vez en otro país
advirtió el senador.
Afectación para el sector agroindustrial
Fernández González destacó que el sector agroindustrial se encuentra entre las industrias más afectadas, que podría resentir los primeros golpes debido a la fuerte dependencia del mercado estadounidense.
En Estados Unidos no puedes cultivar aguacate, no te alcanza para abastecer el mercado del tomate, ni para abastecer ciertas verduras,
puntualiza el senador.
De acuerdo con sus estimaciones del Senado, el impacto sería significativo, ya que el 60% del desayuno de cada estadounidense está compuesto por productos de origen mexicano.
Salida de empresas
El análisis del Senado coincide con las proyecciones del International Chamber of Commerce México (ICC México), que ya ha identificado cinco posibles efectos negativos derivados de las políticas proteccionistas de Trump.
Entre los principales riesgos que, advierte el organismo empresarial internacional, están el incremento de costos de producción, lo que erosionará la competitividad de sectores en la región, así como la reducción de la fuerza laboral o la reubicación de empresas, poniendo en riesgo miles de empleos y afectando la inversión en capacitación y desarrollo del capital humano.
También se prevé una pérdida de confianza de los inversionistas debido a la volatilidad e incertidumbre que generan medidas proteccionistas, y el encarecimiento de productos finales que afectará el poder adquisitivo de los consumidores en México, Estados Unidos y Canadá
alertó el ICC.
Además de la disrupción de cadenas de suministro altamente integradas que dependen de la libre circulación de insumos y componentes entre los tres países, antes de convertirse en productos terminados.
La alianza que podría ayudar a México y frenar a Trump
A pesar del panorama, Fernández González destacó que México aún cuenta con una estrategia para enfrentar el escenario arancelario: fortalecer su relación con estados clave dentro de Estados Unidos, a través del T-MEC.
Nosotros hemos detectado 10 estados de la nación en los cuales tenemos que trabajar de la mano porque son clave para esta revisión del T-MEC. Evidentemente, quien lleva la revisión es el canciller (Juan Ramón de la Fuente) junto con el secretario de Economía (Marcelo Ebrard), pero a mí como senador lo que me corresponde es generar estos micro cabildeos en ciertas zonas para que la gente entienda la importancia de México
explica el legislador.
La estrategia consiste en reforzar la colaboración con estos estados para demostrar el papel fundamental de México en la economía estadounidense.
Los estados identificados como prioritarios para esta alianza son: Alabama, Arizona, Kentucky, Louisiana, Michigan, Mississippi, Missouri, Nuevo México, Texas y Utah, además de California, que se considera un actor clave adicional.
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