AT&T México redujo a -19 millones de dólares el flujo operativo (EBITDA) negativo durante el tercer trimestre del año, una disminución de 67% respecto a flujo negativo reportado en el mismo periodo de 2019.

En el informe del tercer trimestre, el operador de telecomunicaciones de origen estadounidense reportó también una reducción tanto en los ingresos como en el número de clientes.

En el mercado local, AT&T alcanzó ingresos en el periodo por 643 millones de dólares,  cifra que supone una contracción de 10.3% anual.

La pérdida de ingresos obedeció principalmente a la reducción de ventas de equipos, además de presiones cambiarias.

Respecto a los clientes, la base llegó a 18.4 millones, por debajo de los 18.6 millones del comparativo, lo que refleja una pérdida de clientes de pospago a la par de un incremento en los clientes de prepago.

Todavía sentimos el impacto de COVID-19; sin embargo, pese a la adversidad, cerramos el Q3 financieramente más fuertes que el trimestre anterior

dijo Mónica Aspe, CEO Interina de AT&T México

A nivel global, AT&T considera que las interrupciones causadas por la emergencia sanitaria, tanto a nivel nacional como internacional, impactaron sus resultados de operación.

En el tercer trimestre de 2020, la compañía reconoce aproximadamente 190 millones de dólares o 0.02 dólares por acción diluida de costos incrementales, con un aumento secuencial en los costos para proteger a los empleados y contratistas de primera línea.

Además de los costos incrementales, la empresa estima que sus operaciones y comparabilidad se vieron afectadas por un estimado de 1,715 millones de dólares por presiones relacionadas con el coronavirus durante el trimestre como:

  • La reanudación de la temporada de la NBA, lo que resultó en el cambio al tercer trimestre de los costos deportivos en los que se incurrió históricamente durante el segundo trimestre, compensado por los ingresos por publicidad
  • Menores ingresos por licencias de televisión y producción debido a suinterrupción y el cierre parcial de las salas de cine, así como el aplazamiento de los estrenos en salas
  • La renuencia de los consumidores a volver a niveles anteriores, impulsando servicios de roaming internacional inalámbrico significativamente menores que no implican una reducción de gastos directamente correlacionada

Para AT&T, incluso con la reapertura parcial de la economía y una mejor experiencia de cobranza, los efectos económicos de la pandemia y los cambios sociales resultantes no son predecibles.

Por ello, considera que existe una serie de factores que podrían afectar sus resultados futuros de operaciones, incluida la efectividad de las medidas de mitigación de COVID-19; la duración de la pandemia; condiciones económicas globales; cambios en sus operaciones; así como cambios en la confianza, los comportamientos y el gasto de los consumidores.

En consecuencia, espera que los resultados operativos y los flujos de efectivo continúen siendo afectados por la contingencia de salud mientras ésta persista.

Por ello, pelrevé que los resultados del cuarto trimestre se vean afectados ante menores ingresos por el cierre parcial de las salas de cine y el aplazamiento de los estrenos, aunque parcialmente compensados ​​por una menor producción y otros gastos de programación.

Asimismo, espera una disminución de los ingresos por servicios inalámbricos de roaming internacional debido a la reducción de viajes y mayores gastos para proteger a los empleados, contratistas y clientes de primera línea.