La avena es uno de los cereales más utilizados en los desayunos debido a las propiedades nutritivas que posee; sin embargo, una escasa oferta provocó un repunte de tres dígitos en su precio durante el último año.
El 11 de octubre, la cotización de la avena cerró en un máximo histórico de 6.73 dólares por bushel (14.5 kilogramos) en el mercado de futuros de Chicago. En el transcurso de 2021 alcanzó niveles no vistos desde marzo de 2014, de acuerdo con datos de Bloomberg. Este martes finalizó en 6.5 dólares por bushel.
Entre los granos, la avena registra el mayor incremento en precio, pues acumula un rendimiento de 120% en 12 meses, mientras que el maíz repunta 31%; el trigo, 18%; la soya, 17%, y el arroz, 10%, de acuerdo con un análisis de Banco Base que considera a 38 de las principales materias primas.
De esa muestra, la avena supera los retornos de otros commodities como metales, minerales, productos agrícolas, así como energéticos, y solo se ubica por debajo del acero y el gas natural de Europa, donde una escasez de suministros le provocó un fuerte repunte de 446%, en el mismo lapso.
La subida en el precio de la avena fue provocada por las sequías que azotaron a Estados Unidos, Canadá y en menor medida a productores europeos como Suecia y Finlandia, a lo largo del verano.
De acuerdo con el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, se estima que la producción de avena este año sea de 41.3 millones de bushel, lo que significa un mínimo histórico y una disminución de 39% respecto a 2020.
En Canadá, que es el principal exportador de avena en el mundo, los pronósticos indican que la cosecha alcanzará 268.7 millones de bushel, 15% menos que el año pasado.
Hay un problema en la oferta provocadas por las condiciones climáticas adversas (…) Los productos de avena han ido en aumento, se utiliza en los desayunos, la demanda es fuerte, pero la reducción de la oferta provocó que aumente el precio
dijo Ana Azuara, especialista en el mercado de commodities de Banco Base
Además de su uso en el consumo humano en forma de cereales, leches e incluso productos de belleza, la avena también es empleada como alimento para el ganado. Ante su poca oferta, los cárnicos suelen tener incrementos en el precio.
Azuara explicó que es poco probable que para la siguiente temporada de producción, que inicia entre abril y mayo, los agricultores decidan no incrementar las hectáreas de siembra de avena, pues aprovecharán los precios elevados para tener mayores ganancias.
En su lugar podrían optar por aumentar la producción de maíz, cuya cosecha también fue afectada por las sequías, debido a que puede utilizarse, además del consumo humano, en alimento para el ganado, en la fabricación de energéticos como el etanol y aceites.
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Impacto al consumidor
Aunque se proyecta que hacia el siguiente año los precios de las materias primas tengan una corrección moderada, los precios altos continuarán por un tiempo prolongado, con la posibilidad de persistir si la inflación no es transitoria, como señalan algunos funcionarios de bancos centrales, expuso Azuara.
Este aumento de los precios de los alimentos continuará, al menos hasta ver menos presiones en el mercado energético. En medio de la escasez de gas natural, algunas plantas de fertilizantes cerraron, aumentando los costos de producción de los granos, situación que, en determinado momento, provocaría que el alza se traslade al consumidor final.
De las empresas nacionales que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), Bimbo y Gruma tienen la mayor exposición al repunte de los precios de la avena, maíz y otros granos.
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Bimbo tiene un gran segmento de productos que utilizan la avena y en su cadena de suministro se tiene que proveer del mismo. Aunque Bimbo mantiene coberturas en sus principales insumos si este incremento de precio persiste, en un primer momento lo tendrá que absorber la empresa y posteriormente de manera paulatina será impactado al precio de mercado
señaló Guillermo Guzmán, CEO de Trading Advisor
En el caso de Gruma, fabricante de harina y tortillas, tiene en sus productos básicos la avena en el mercado de Venezuela; sin embargo, no es representativo en sus ingresos y el incremento en el precio del grano no tendrá un impacto significativo en sus hojas de balance, según el analista.