Nueve desarrolladores de vacunas de Estados Unidos y Europa se comprometieron este martes a mantener los estándares científicos con los que se llevarán a cabo sus inmunizaciones experimentales, en medio de una carrera mundial apresurada para contener la pandemia de coronavirus.
Las compañías, incluidas Pfizer, GlaxoSmithKline y AstraZeneca, en una declaración conjunta hicieron un “compromiso histórico (…) para mantener la integridad del proceso científico mientras trabajan por posibles presentaciones regulatorias globales y aprobaciones de las primeras vacunas contra el COVID-19”.
El movimiento inusual de prometer seguir reglas establecidas subraya un debate altamente politizado sobre qué acción se necesita para frenar rápidamente la propagación de la enfermedad mortal y reactivar los negocios y comercios globales.
El jefe de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) dijo en agosto que el proceso normal de aprobación de una vacuna contra el COVID-19 podría pasarse por alto, siempre que los funcionarios estuvieran convencidos de que los beneficios superan los riesgos, lo que provocó un llamado a la precaución por parte de la Organización Mundial de la Salud.
Los desarrolladores a nivel mundial aún tienen que producir datos de pruebas a gran escala que muestren las infecciones reales en los participantes, sin embargo, Rusia aprobó una vacuna el mes pasado, lo que llevó a algunos expertos occidentales a criticar la falta de pruebas.
El director de la china Sinovac Biotech dijo que la mayoría de sus trabajadores y sus familias ya han probado una vacuna experimental desarrollada por la firma, en el marco del programa de uso de emergencia del país.
“Queremos que se sepa que también en la situación actual no estamos dispuestos a comprometer la seguridad y la eficacia”, dijo uno de los firmantes, Ugur Sahin, director ejecutivo del socio alemán de Pfizer, BioNTech.
“Aparte de la presión y la esperanza de que una vacuna esté disponible lo más rápido posible, también hay mucha incertidumbre entre la gente de que algunos pasos del desarrollo pueden omitirse aquí”, agregó.
BioNTech y Pfizer han planteado la posibilidad de revelar datos fundamentales de los ensayos en octubre, lo que podría colocarlos en el centro de la compleja política presidencial de Estados Unidos, previo a las elecciones del 3 de noviembre.
Según el comunicado, las nueve empresas se comprometen a seguir las pautas establecidas de las autoridades expertas reguladoras, como la FDA.
Los reguladores occidentales han enfatizado que no tomarían atajos, sino que priorizarían la carga de trabajo de revisión y permitirían pasos de desarrollo en paralelo que normalmente se manejarían consecutivamente.