En México, el acceso a los servicios de los bancos todavía es un reto, especialmente en las zonas rurales, y aunque el número de sucursales ha aumentado en los últimos tres años, el tiempo que a los mexicanos les toma llegar sigue siendo alto, e incluso ha aumentado en algunos casos.
De acuerdo con datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), al cierre de 2021 en el país había 11,525 sucursales bancarias, cifra que para 2024 incrementó en 2.7%, al sumar 318 puntos de contacto y alcanzar 11,843 sucursales.
A esto se suman las 3,149 unidades del Banco del Bienestar, que han expandido su presencia en el país con el objetivo de tener un punto de acceso más cercano. Sin embargo, la mayor disponibilidad de estos puntos físicos no necesariamente se traduce en un acceso más fácil o rápido para los usuarios.
Bancos: lejos de las zonas rurales
La Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) 2024 revela que el tiempo promedio para que un adulto llegue a su sucursal bancaria de uso regular es de 22 minutos, un aumento respecto a los 21.6 minutos de 2021.
En contraste, los cajeros automáticos han reducido ligeramente el tiempo de traslado de 19.4 minutos en 2021 a 18.4 minutos en 2024. Por otro lado, los corresponsales bancarios, como Oxxo y otros comercios, son los más accesibles con un tiempo promedio de 12 minutos.
Pero las diferencias en acceso son más notorias entre zonas urbanas y rurales. En las ciudades, el tiempo promedio para llegar a una sucursal es de 16 minutos, mientras que en el segundo caso se dispara a 38 minutos.
Mientras que en el caso de los cajeros automáticos, el tiempo es de 30.6 minutos en zonas rurales y 14.7 en urbanas. En cuanto a los corresponsales bancarios, los habitantes de zonas rurales tardan 22.8 minutos en llegar, mientras que en áreas urbanas solo 7.8 minutos.
Sucursales, clave para la contratación
A pesar de los tiempos de traslado, las sucursales bancarias son el principal canal para contratar productos financieros. De acuerdo con la ENIF, el 43% de las personas que abrieron su cuenta de captación más reciente lo hicieron en una de ella.
El segundo medio más común es a través del lugar de trabajo, en su mayoría por cuentas de nómina. Además, un 20% de los usuarios obtuvo su cuenta gracias a un programa social, lo que refleja la importancia de estas iniciativas en el proceso de bancarización.
En el caso de créditos y seguros, las sucursales también son el canal principal.
El 49% de los créditos y el 45% de los seguros fueron contratados en las ventanillas de un banco; sin embargo, en créditos, el 26% de los usuarios prefirió contratar en un establecimiento comercial, mientras que en seguros el 32% lo hizo a través de un promotor.
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