En su primer reporte trimestral como compañía pública, Uber reportó ingresos por 2,760 millones de dólares, frente a los 2,750 millones previstos por el mercado, mientras que las pérdidas por acción fueron de 2.26 dólares, por debajo de los 2.31 dólares que se esperaban.

Aún así, las pérdidas operativas superaron los 1,000 millones de dólares por segundo trimestre consecutivo.

En el periodo de enero a marzo, la compañía tuvo 1,550 millones de viajes y sus reservas brutas fueron de 14,650 millones de dólares.

La mayoría de estas cifras fueron reportadas previamente por Uber en una actualización de su oferta pública inicial, que incluían resultados del primer trimestre no auditados.

Las acciones de Uber subieron casi 1.3% luego de la publicación de resultados y a las 4:00 pm (hora de la Ciudad de México) pierden 0.35% en operaciones tras el cierre del mercado.

“A principios de este mes, tomamos el importante paso de convertirnos en una empresa pública, y ahora estamos enfocados en ejecutar nuestra estrategia para convertirnos en una ventanilla única para el transporte y el comercio local”, dijo el CEO de Uber, Dara Khosrowshahi, en un comunicado de prensa.

“En el primer trimestre, la participación en nuestra plataforma fue más alta que nunca, con un promedio de 17 millones de viajes por día y una tasa anual de reservas brutas de 59,000 millones. Nuestro alcance global sigue siendo un diferenciador importante y mantenemos el liderazgo de la categoría de viajes compartidos en cada región que servimos”, presumió.

Si bien sus resultados sobrepasaron las expectativas de los analistas, Uber aún no puede cantar victoria, ya que las acciones de la compañía se han depreciado casi 10% desde su debut en bolsa. Desde el punto de vista técnico, Uber no tiene buen panorama para el corto plazo.

“Veo una pérdida de momentum en las acciones de Uber y mientras no cotice por encima de 41.70 dólares, no veo posibilidad para que se rearme y suba su precio”, comentó la especialista en estrategias de inversión, Pattie Jabbaz.

A la presión que atraviesan las acciones se suma un problema fundamental que continúa hasta el momento: Uber no genera utilidades.