Precios bajos y rendimientos altos ha sido la combinación para que los inversionistas locales e internacionales inviertan en los bonos mexicanos (renta fija).

El rendimiento en pesos que pagaba un bono mexicano a 10 años (M10) a finales de 2018 era de 8.71%, pero en la sesión del miércoles fue de 7.35%. La demanda por este activo provocó el ajuste en el rendimiento y un impulso en el precio.

En lo que va del año, el precio de un (M10) aumentó 9.05% a 107.78 pesos. Lo anterior es superior a lo que han dado algunos activos de riesgo, como las acciones. El S&P/BMV IPC, el principal índice de la Bolsa Mexicana de Valores, perdió 2.90% en el mismo lapso.

El apetito por los bonos mexicanos responde a distintos factores. Elevadas tasas de interés por parte de Banco de México (Banxico), la expectativa de un ajuste en ésta, así como el recorte que hizo hace unos días la Reserva Federal a su tasa, el primero desde 2008.

Los instrumentos de deuda local se han visto beneficiados por las oportunidades de ‘carry trade’, al mantenerse un elevado nivel de tasa real comparado con otros emergentes y cuyo atractivo ha incrementado por el cambio de tendencia de la Reserva Federal

dijo Jonathan Zuloaga, asesor macroeconómico y de mercados de Columbus.

El carry trade es una estrategia en la que los inversionistas venden una divisa con una tasa de interés relativamente baja y compran otra con una tasa más alta para aprovechar el diferencial de las tasas.

Banxico mantiene una tasa de interés de 8.25%, un máximo desde 2009 y el mercado espera que siga los pasos de la Reserva Federal en su reunión del 15 de agosto.

Los analistas que participan en la encuesta de expectativas de Citibanamex ven, de manera unánime, que el siguiente movimiento de política monetaria de Banxico será un recorte de 25 puntos base en su tasa referencial.

De concretarse lo anterior, será la primera vez desde junio de 2014 que Banxico recorta el precio del dinero. La decisión provocaría que el precio de los bonos soberanos mexicanos aumente y el rendimiento baje.

“La oportunidad de inversión en bonos mexicanos a 10 años está presente y podrían tomarse posiciones para ese recorte de tasas”, dijo Octavio Rojas, asesor en inversiones independientes en ImLions.

En los próximos meses, el atractivo sobre la renta fija se puede mantener. En una parte, porque los analistas consultados por Citibanamex esperan que la tasa objetivo de Banxico se ubique en 7.75% para finales de este año.

Si bien se pueden esperar bajas en la tasa de interés, la mayoría de las veces el ajuste en el rendimiento del bono no es en la misma proporción, pues el mercado lo va descontando

comentó Guillermo Delgado, director de Operaciones en Black Wallstreet Capital.

La escalada de la guerra comercial entre Donald Trump, presidente de Estados Unidos, con China, la salida de Reino Unido de la Unión Europea sin acuerdo, tal como lo ha anticipado el primer ministro británico Boris Johnson, y la desaceleración económica global son temas que provocan que la aversión al riesgo de los inversionistas sea elevada, por lo que optan por instrumentos más seguros.

De acuerdo con el índice Miedo y Codicia de CNNBusiness, el ‘miedo extremo’ es la emoción que está dirigiendo al mercado en este momento, un punto a favor de los instrumentos de renta fija.