Reino Unido analiza negociación postbrexit y elecciones de EU
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Recomiendan a Reino Unido no condicionar la negociación postbrexit a elecciones en Estados Unidos

Recomiendan a Reino Unido no condicionar la negociación postbrexit a elecciones en Estados Unidos

Reino Unido no debería esperar el resultado de las elecciones presidenciales en Estados Unidos para avanzar en sus negociaciones comerciales posbrexit con la Unión Europea, afirmó un enviado del gobierno estadounidense el jueves.  

Varios medios británicos afirmaron que Londres paralizó las conversaciones con Bruselas mientras esperaba saber si es Joe Biden o Donald Trump el ganador de las elecciones presidenciales celebradas el martes. 

Es “simplemente falso”, desmintió un portavoz de Downing Street.

“Hemos dicho repetidamente que se nos está acabando el tiempo y que realmente necesitamos avanzar para salvar las diferencias que aún existen entre el Reino Unido y la Unión Europea”, afirmó. 

Una ruptura brutal sin acuerdo sería mejor recibida por Trump que por su rival demócrata, abriendo la vía para un gran acuerdo de libre comercio con Estados Unidos en el que Londres tiene puestas muchas expectativas.  

Pero el enviado especial de Washington para Irlanda del Norte, Mick Mulvaney, advirtió que las elecciones estadounidenses podrían no resolverse hasta “finales de noviembre, principios de diciembre”. Y dijo “desaconsejar al gobierno británico esperar su resultado”.

A menos de dos meses del fin de la transición posbrexit, esperar más tiempo para cerrar un acuerdo con la UE podría ser “autodestructivo”, advirtió Mulvaney en una videoconferencia con el Instituto de Asuntos Internacionales y Europeos (IIEA), un centro de reflexión de Dublín.  

El Reino Unido abandonó oficialmente la Unión Europea a finales de enero, pero sigue sujeto a las normas de la UE hasta el final del período de transición, el 31 de diciembre.  

A falta de un acuerdo comercial para esa fecha, las relaciones entre ambas partes se regirían por las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC), que implican elevados aranceles y tendrían consecuencias potencialmente desastrosas para una economía británica ya muy debilitada por la pandemia de coronavirus.

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