El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, mencionó que su gobierno analiza si puede restaurar el acceso a internet en Cuba, país que calificó como “Estado fallido” y le ofreció vacunas contra COVID-19, en medio de las protestas que se viven en la isla.

También dejó claro que no prevé permitir el flujo de remesas a Cuba, que podría aliviar la presión económica que contribuyó a la ira generalizada.

“Cuba es, lamentablemente, un Estado fallido que reprime a sus ciudadanos”, opinó Biden.

 En la isla caribeña, donde desde hace más de seis décadas rige un sistema de partido único, el del Partido Comunista de Cuba, miles de personas se volcaron el domingo a las calles en históricas protestas contra el gobierno.

 El mandatario dijo que Estados Unidos está analizando si puede restaurar internet en Cuba, que sufrió cortes tras las manifestaciones.

 “Han cortado el acceso a internet. Estamos considerando si tenemos la capacidad tecnológica para restablecer ese acceso”, señaló durante una conferencia de prensa con la canciller alemana, Angela Merkel, de visita en Washington.

Una idea planteada por los expertos sería enviar globos con WiFi móvil, una medida tomada durante desastres naturales.

Según periodistas de la AFP en La Habana, el servicio de internet móvil a través de 3G y 4G comenzó a restablecerse de manera inestable la mañana del miércoles, pero el acceso a redes sociales se mantenía restringido.

Protestas

La Habana ha señalado a Washington de incentivar las protestas mediante una campaña orquestada en Twitter.

Biden señaló que “estaría dispuesto a donar cantidades significativas de vacunas si, de hecho, me aseguraran que una organización internacional administraría estas vacunas y lo haría de tal manera que los ciudadanos promedio tuvieran acceso a estas vacunas”.

 La oferta tiene lugar cuando Cuba atraviesa una escasez crónica de electricidad, alimentos y medicamentos, además de una crisis económica y repunte de contagios de COVID-19.

Como candidato, Biden se había mostrado afín a levantar algunas restricciones a Cuba, como la que pesa sobre las remesas, segunda fuente de divisas de Cuba después de la exportación de servicios médicos. 

 Pero hasta ahora no ha revertido esa ni otras políticas de Trump, quien endureció el embargo económico que Estados Unidos aplica desde 1962 a Cuba para forzar un cambio de régimen.

Países como México se han pronunciado en favor de levantar el embargo a la isla con fines humanitarios que permitan a la isla atender la crisis sanitaria.