El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) confirmó que hay dos mexicanos desaparecidos tras el colapso del puente Francis Scott Key en Baltimore, Estados Unidos, provocado por el choque de un buque portacontenedores contra su estructura.
En su tradicional conferencia de prensa matutina, el mandatario federal señaló que ya los tienen debidamente identificados y se mantienen en contacto con sus familiares, aunque no dio detalles sobre si las autoridades estadounidenses continuarán con su búsqueda. Además informó que hubo un tercer connacional afectado, quien ya está con su familia, pero prefiere mantenerse fuera del ojo público.
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— Gobierno de México (@GobiernoMX) March 27, 2024
Asimismo, dio a conocer que entre los seis desaparecidos que reportaron las autoridades de Estados Unidos, también se encuentran dos centroamericanos, pero no reveló sus nacionalidades.
AMLO aprovechó el espacio para mencionar que en este tipo de situaciones se evidencia cómo los indocumentados son quienes realizan trabajos de alto riesgo y en las noches, por lo que no deberían ser mal vistos por políticos insensibles durante sus campañas electorales.
¿Qué pasó en Baltimore?
El puente Francis Scott Key, de la ciudad de Baltimore, se derrumbó sobre el río Patapsco después de que un barco carguero chocó contra uno de sus pilares, provocando que varias personas y vehículos cayeran al agua.
Este martes por la tarde, la Guardia Costera anunció la suspensión de las tareas de rescate, al presumirse que los seis desaparecidos fallecieron.
Basándonos en la duración de la búsqueda (…), la temperatura del agua, en este momento no creemos que encontremos a estas personas con vida
declaró el vicealmirante de la Guardia Costera, Shannon Gilreath en una rueda de prensa.
Las tareas se reanudarán este miércoles, pero ya como trabajos de recuperación de cuerpos.
Mantienen en suspenso ley para criminalizar a migrantes
Las declaraciones del presidente mexicano se dan en el marco de una disputa legal en Estados Unidos para implementar una ley de Texas respaldada por los republicanos que permitiría a autoridades estatales detener y procesar a sospechosos de cruzar ilegalmente la frontera desde México.
Al momento, un tribunal de apelaciones mantiene en suspenso dicha iniciativa, lo que se considera un triunfo para la administración del presidente Joe Biden durante la campaña electoral, ya que se ha manifestado en contra.
En un fallo por 2-1 emitido a última hora del martes, un panel de la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito, con sede en Nueva Orleans, denegó la petición de Texas de permitir la entrada en vigor de la ley mientras se tramita en el mismo tribunal el recurso del estatal contra la decisión de un juez que la bloqueaba.
La ley, denominada formalmente SB4, se ha convertido en un punto álgido de una batalla entre Texas y el gobierno de Biden sobre la seguridad fronteriza y la inmigración. La iniciativa convertiría en delito estatal entrar o volver a entrar ilegalmente en Texas desde un país extranjero y facultaría a los jueces estatales para ordenar que los infractores abandonen Estados Unidos, con penas de prisión de hasta 20 años para quienes se nieguen a cumplirlo.
La semana pasada, la Corte Suprema permitió que entrara en vigor, pero horas más tarde el panel del tribunal restableció la medida cautelar dictada en febrero por el juez de distrito David Ezra, que frenaba su aplicación.
Esta propuesta inconstitucional nunca debería haber llegado tan lejos, y esperamos que los tribunales la bloqueen permanentemente para que podamos volver a discutir soluciones políticas reales
dijo en un comunicado Edna Yang, codirectora ejecutiva del grupo American Gateways.
La demanda, presentada en enero, argumentaba que la medida viola la Constitución y la ley federal al interferir con el poder del gobierno del país para regular la inmigración, además de ir en contra de la decisión de la Corte Suprema de 2012.
La administración de Biden ha dicho que la inmigración es competencia exclusiva del gobierno federal y que la ley de Texas pondría en peligro la aplicación de complejas leyes nacionales que establecen procedimientos de deportación y permiten a los inmigrantes solicitar asilo y otros estatus legales.
La inmigración y la seguridad en la frontera con México son temas candentes para los votantes de cara a las elecciones estadounidenses del 5 de noviembre, en las que el presidente demócrata aspira a un segundo mandato.
Con información de medios nacionales e internacionales
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