La producción de crudo de Petróleos Mexicanos (Pemex) registró su mayor retroceso en casi dos años, tras el incendio en la plataforma Nohoch-A y el derrame en la Sonda de Campeche.

En julio, la producción de la empresa retrocedió 2.2%, a 1.532 millones de barriles diarios, su mayor caída mensual desde agosto de 2021, de acuerdo con cifras de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).

La baja de aquella ocasión, de 3.3% a 1.552 millones de barriles diarios, derivó de la explosión en la plataforma marina de Pemex E-Ku-A2, del activo Ku-Maloob-Zaap.

La producción de condensados de la estatal también tuvo una caída mensual de 2.8%, a 282,161 barriles diarios, el mayor descenso desde agosto del año pasado.

Como resultado, la extracción de hidrocarburos líquidos (que considera crudo y condensados) de la compañía que dirige Octavio Romero Oropeza cayó 2.3% mensual  a 1.814 millones de barriles diarios.

Sin embargo, la producción se mantuvo al alza en su comparación anual, con un incremento de 3.3% en hidrocarburos líquidos, 0.2% en petróleo y 23.7% en condensados.

La producción petrolera nacional, que considera la de Pemex y operadores privados, fue de 1.363 millones de barriles diarios en julio, un retroceso de 2.1% mensual, según los datos de la CNH.

Incendio y recuperación

El pasado 7 de julio, Pemex registró un incendio en la plataforma Nohoch Alfa, del campo Cantarell, que provocó la muerte de dos trabajadores, mientras uno se mantenía como desaparecido.

Tras el incidente, Pemex cerró los pozos de la zona, lo que significó una pérdida inicial de 700,000 barriles y comenzó su reapertura gradual en los días siguientes.

A finales de julio, Romero Oropeza dijo en conferencia de prensa que estaban a 8,000 barriles de recuperar sus niveles de producción.

En tanto, el derrame en la Sonda de Campeche asociados con una fuga en un sistema de ductos del campo Ek-Balam comenzó el 3 de julio y demoró 18 días en ser reparada.

La estatal afirmó que la fuga en ese periodo ascendió a 1,368 barriles, pese a que investigadores que alertaron previamente de la fuga estimaron una cantidad superior.

Ambos incidentes siguieron afectando la producción de la compañía en este mes, aunque en menor magnitud, ya que a principios de agosto el director general de Pemex manifestó que aún estaban 20,000 barriles por debajo de su producción tras el incendio y la fuga.

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