Airbus sigue aprovechando el difícil momento que enfrenta su rival Boeing. La corporación europea ha logrado asegurar los pedidos de un total de 65 aviones de dos empresas prominentes en Asia, que previamente eran clientes destacados de su competidor estadounidense y que actualmente se encuentra inmerso en problemas de seguridad.
Este jueves, Japan Airlines (JAL, por su sigla en inglés) anunció que comprará 21 aviones A350-900 de fuselaje ancho y 11 A321neo de fuselaje estrecho a Airbus. Esto significa que proporcionará por primera vez aviones de pasillo único.
La segunda mayor aerolínea de Japón también ha anunciado la compra de 10 Boeing 787 Dreamliner. JAL ha sido tradicionalmente un cliente de Boeing; sin embargo, Airbus realizó su primera venta a la aerolínea en 2013, con aviones A350.
La mayor aerolínea de Corea del Sur, Korean Air, también informó que encargaría 33 A350s en una operación valorada en 13,700 millones de dólares, su primera compra de esa familia de aviones, mientras prepara su fusión con Asiana Airlines.
Las compras a Airbus se producen en un momento en que Boeing está sometida a un fuerte escrutinio normativo tras el incidente del 5 de enero de Alaska Airlines, donde un panel del avión 737 MAX de Boeing sufrió una explosión en pleno vuelo.
Por el incidente se iniciaron investigaciones a la compañía sobre las normas de seguridad y calidad de la compañía en su proceso de producción.
¿Qué significa esta operación para la empresa?
Con estos pedidos, las dos aerolíneas asiáticas son las últimas en introducirse en un mercado de aviones de largo recorrido cada vez más restringido, tras una prolongada caída de la demanda de los grandes aviones del sector.
La demanda de aviones más eficientes aumenta a medida que los viajes internacionales se acercan a su plena recuperación tras la pandemia y los problemas de la cadena de suministro, lo que genera una competencia por los aviones y los contratos de motores y mantenimiento.
JAL ha informado que la entrega de los aviones está programada para llevarse a cabo entre los años fiscales 2025 y 2033, con un costo total de catálogo estimado en unos 12,390 millones de dólares.
Además, la aerolínea ha anunciado la adquisición de un A350-900 adicional para reemplazar la aeronave que resultó dañada en una colisión en la pista del aeropuerto de Haneda en enero.
JAL ha explicado que esta compra se realiza con el objetivo de incorporar aviones de nueva generación, los cuales son más eficientes, para fortalecer tanto sus operaciones de aerolíneas de servicio completo como de bajo costo. Esta decisión se debe en parte a la escasez global de aviones nuevos, una situación que se espera persista en el futuro próximo.
Con información de Reuters
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