La industria de Fondos Cotizados en Bolsa (ETF, por sus siglas en inglés) no para de romper récords.
A nivel mundial, y por primera vez en la historia, los activos bajo administración de los ETF rompieron la barrera de los cinco billones de dólares (5.06 billones) al cierre de agosto, de acuerdo con la consultora independiente ETFGI.
El número de ETF listados en las distintas bolsas de valores aumentó 7% a 5,665 hasta finales de agosto.
La trayectoria marca que, para finales de este año, los activos bajo administración de los Fondos Cotizados en Bolsa se ubiquen en 5.4 billones de dólares (bdd) y para 2020 ronden los 7.6 bdd, según proyecciones de EY.
Los ETF cotizan en un mercado accionario y replican el comportamiento de un índice accionario, de renta fija o cualquier otro activo financiero.
Los inversionistas -desde el pequeño hasta el institucional- han encontrado en estos un instrumento que les permite la misma diversificación que un fondo de inversión y la liquidez de una acción. En México, la historia sigue la misma tendencia.
Los inversionistas (mexicanos) han migrado de un comportamiento local hacia el internacional
Juan Manuel Olivo, Director de Promoción y Emisoras de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
En el 2013, el Sistema Internacional de Cotizaciones (SIC) de la BMV albergaba el 11% de todos los ETF listados a nivel mundial y aportaba el 20% de las operaciones del mercado local. Un lustro después, la plataforma ya tiene listados el 15% de todos los instrumentos del mundo y aporta el 40% de las operaciones de la Bolsa.
El mercado mexicano de ETF puede presumir, con sus casi 860 instrumentos listados, una diversificación a cualquier sector y región del mundo con la particularidad que se puede hacer en pesos mexicanos. A eso se le deben sumar características del propio instrumento como menor costo y fácil acceso.
Quedan días de crecimiento
La industria de los ETF en México tiene una tendencia alcista, al menos para el mediano plazo. Por un lado, la adopción constante de inversionistas institucionales (como las Afores y fondos de inversión) será un punto a favor que ayudará al crecimiento del SIC tanto en activos como en profundidad del mercado, de acuerdo con el director General de Vanguard México, Juan Hernández.
La idea de diversificación es otro punto que impulsará a los ETF.
A futuro, en términos de portafolios de inversión, la teoría y lo que dicen los asesores financieros es que la diversificación es importante. Un portafolio de inversión variado debe tener un enfoque no solamente de empresas locales sino de emisoras internacionales, dijo Olivo.
No todo lo que brilla es oro
Hasta este punto, la industria mundial de ETF atraviesa por momentos de abundancia, pero no siempre será así.
La tendencia ha sido clara: listar ETF en las distintas bolsas de valores, pero si estos activos son de nicho o si sus administradores no hacen una buena labor de venta a los fondos de inversión, habrá ETF que terminen por ser deslistados, comentó Hernández.
“Va a llegar un momento en que muchos de estos ETF no van a captar activos y empezará un equilibrio del mercado”, expuso Hernández.
Adicionalmente existe la regla en México que, si un ETF no es operado por un periodo de seis meses, es deslistado.
Los ETF implican un menor costo y permiten tener acceso a productos a los que antes era más difícil acceder. Pero el inversionista debe tener en cuenta que existe el riesgo de que el ETF no siempre replique el rendimiento del activo que sigue y la ganancia dependerá de la habilidad del administrador del instrumento.