Nota del editor: este artículo es meramente informativo y no representa ninguna recomendación de inversión.

La pandemia de COVID-19 provocó una alta volatilidad e incertidumbre en el plano bursátil, sin embargo, las acciones defensivas lucen atractivas como opción para comprar, mantener unos meses y cobrar rendimientos a finales del año.

La incertidumbre se refleja en la caída de 11.27% que tiene el S&P/BMV IPC, el principal índice de la Bolsa Mexicana de Valores, en lo que va de 2020.

Acciones de bancos, con más dudas que certezas

Una persona con un panorama de inversión de tres o cuatro meses debería escoger acciones con buenos fundamentales, contracíclicas y enfocadas a sectores minoristas y de alimentos

comentó Eugenio Gallegos, analista financiero y bursátil independiente.

Gruma, productora de harina de maíz y tortillas; Femsa, con exposición a tiendas de conveniencia, farmacias, gasolineras y embotelladora de Coca-Cola; Chedraui, minorista y Lala, dedicada a productos lácteos y derivados, son las acciones favoritas de los inversionistas y analistas.

Una acción defensiva busca minimizar las pérdidas en un portafolio de inversión. El sector defensivo por excelencia es el de consumo básico, ya que las personas, en una situación financiera adversa, dejarían de adquirir ciertos productos o servicios, para no afectar el consumo de alimentos.

El producto de venta de Gruma es de consumo prioritario y, técnicamente, inelástico. Es una emisora muy defensiva y una de mis favoritas

dijo Cipactli Jiménez, cofundador de snowball.mx, ecosistema de inversión.

Gruma fue una de las pocas emisoras que reportó alzas en ingresos, flujo operativo y utilidad neta en el segundo trimestre del año, pese a las medidas de confinamiento para desacelerar el ritmo de contagios del COVID-19. La utilidad neta de la compañía repuntó 38% anual a 1,751 millones de pesos.

En lo que va del año, los títulos de Gruma tienen el segundo mejor rendimiento, entre las 49 acciones más operadas por el mercado, con un alza de 37.74%, solo detrás de la minera Peñoles, que se ve favorecida por el alza en los precios internacionales del oro y la plata.

Femsa es mi acción favorita de medio y largo plazo. Desde el punto de vista técnico está en un punto de inflexión y es parte del grupo de las rezagadas del IPC

comentó Fernando Félix, analista independiente.

Los títulos de Femsa caen 25.50% en el año y, pese a que tuvo una pérdida neta histórica en el trimestre de 10,775 millones de pesos, tiene una ventaja sobre el resto de las emisoras: el efectivo disponible.

Al cierre de junio, Femsa tenía en efectivo 140,420 millones de pesos. Incluso, si liquidara toda su deuda de corto plazo, le quedarían 93,706 millones de pesos.

Otra emisora castigada en el mercado, pero atractiva en el mediano plazo es Chedraui, gracias a un reporte trimestral positivo, de acuerdo con Guillermo Delgado, director de Operaciones en Black WallStreet Capital.

La pandemia no se resolverá en el corto plazo y puede que venga un rebrote, lo que fortalecerá al consumo básico. Nuestro enfoque de inversión es hacia emisoras de consumo básico rezagadas

dijo Delgado.

En 2020, los papeles de Chedraui acumulan una pérdida de 1.92%.

Lala es la emisora de consumo básico más presionada en el año; sus títulos caen 14.75%.

El precio de Lala viene de fuertes ajustes que empezaron desde abril de 2014 y, técnicamente, da señales de cambio de tendencia. Además, su sector es defensivo y de productos de consumo frecuente

comentó Heriberto Sandoval, asesor independiente en inversiones.

Si bien las acciones de consumo básico son atractivas para la mayoría de los analistas e inversionistas, no son el único sector que se presenta como oportunidad de inversión.

Tomando en cuenta que estamos viviendo una reactivación económica, el turismo comenzará a repuntar. En ese sentido, acciones de grupos aeroportuarios como GAP, OMA y Asur, podrían beneficiarse

dijo Iván Santiago, director general y de Inversiones de BlackBull Advisors.

El tráfico de pasajeros de los grupos aeroportuarios cayó en promedio 71% en julio de este año, luego de que en junio se desplomó 90%. La baja en el movimiento de pasajeros se traslada al precio de sus acciones que desciende hasta 31.72% en el año.