La representante comercial de Estados Unidos, Katherine Tai, informó que México perdió el panel sobre medidas biotecnológicas del maíz transgénico, iniciado en el marco del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
En el panel se determinó que los siete reclamos presentados por México por el maíz transgénico no están basados en la ciencia y “socavan el acceso al mercado que nuestro país había acordado proporcionar al T-MEC”.
La decisión del panel reafirma las preocupaciones de larga data de Estados Unidos sobre las políticas biotecnológicas de México y su impacto perjudicial en las exportaciones agrícolas estadounidenses
declaró Katherine Tai.
Por su parte, la Secretaría de Economía emitió un comunicado referente a la determinación del panel, en el que defendió las medidas cuestionadas por México e informó que, pese a ello, el gobierno “respetará la determinación” del panel.
El Gobierno de México no comparte la determinación del Panel, pues considera que las medidas cuestionadas están alineadas con los principios de protección a la salud pública y los derechos de los pueblos indígenas, establecidos en la legislación nacional y en los tratados internacionales de los que es parte. A pesar de ello, el Gobierno de México respetará la determinación, ya que el sistema de solución de controversias del T-MEC es una pieza clave de dicho tratado, como quedó demostrado en el caso sobre Reglas de Origen del sector automotriz que resultó favorable para México
declaró la Secretaría.
El decreto sobre el glifosato y maíz genéticamente modificado, fue publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) en febrero de 2023.
Maíz transgénico: un acuerdo ‘obligado’ para México
Katherine Tai señaló que la decisión tomada por el panel subraya la importancia de las políticas comerciales que permiten a agricultores y productores agrícolas estadounidenses, competir de forma justa, aprovechar su innovación para abordar el cambio climático y mejorar la productividad, bajo premisas guiadas en la ciencia.
Tai dijo que la decisión significa una victoria para los países de todo el mundo que cultivan y utilizan productos de biotecnología, y enfatizó que Estados Unidos espera seguir contando con la colaboración del gobierno mexicano.
Por su parte, y en respuesta a la determinación, el gobierno mexicano reiteró su compromiso de preservar valores fundamentales como la moral pública, la salud, la cultura de la población mexicana, los derechos de los pueblos indígenas, la conservación de los recursos, entre otros aspectos.
También señaló que participará junto con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural y otras dependencias, para continuar preservando los derechos de los ciudadanos mexicanos.
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