Las solicitudes iniciales de subsidio por desempleo en Estados Unidos avanzaron ligeramente, pero se mantuvieron cerca de su menor nivel desde inicios de la pandemia, una señal de que el mercado laboral muestra signos de recuperación pese a la amenaza de la variante delta del COVID-19.

De acuerdo con cifras del Departamento del Trabajo, los nuevos pedidos por desempleo totalizaron en 353,000 en la semana finalizada el 21 de agosto, respecto a los 349,000 del periodo anterior, que fue el nivel más bajo desde marzo de 2020.

El dato quedó apenas por encima de las 350,000 solicitudes esperadas por analistas consultados por Bloomberg y significó el primer incremento en las últimas cinco semanas.

Del mismo modo, el departamento de gobierno informó que los reclamos continuos por beneficios estatales cayeron levemente a 2.86 millones, hasta la semana concluida el 14 de agosto. 

Las aplicaciones de ayudas por desempleo acumulan una caída de 50% en lo que va del año, según The Wall Street Journal, y siguieron disminuyendo en el verano a pesar del repunte de contagios y hospitalizaciones por coronavirus.

Hasta ahora, los gobiernos estatales y locales en Estados Unidos se han resistido a imponer restricciones severas a la actividad empresarial, ayudando a minimizar el impacto económico de la variante delta, señalan economistas.

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En un informe separado, el Departamento de Comercio reportó que el Producto Interno Bruto (PIB) del país creció 6.6% en el segundo trimestre del año, superando la lectura inicial de 6.5%, aunque por debajo de la expansión de 6.7% pronosticada por el mercado.

Las acciones estadounidenses mostraron poca reacción a las cifras del mercado laboral, pues la atención estará puesta en el Simposio Económico de Jackson Hole, en el que se espera que el presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, dará indicios de los siguientes movimientos del banco central.