La Secretaría de Hacienda presentó el día de hoy, a través de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), un nuevo paquete de medidas de reestructuración de créditos para apoyar a personas y empresas a mitigar los efectos económicos derivados de la pandemia de COVID-19, con el objetivo de que obtengan menores tasas de interés, extensión a los plazos de pago y menores cuotas.

La más reciente facilidad regulatoria pretende promover reestructuras de los créditos para que instituciones financieras ajusten los esquemas de pago: deberá disminuir el pago que se venía realizando, al menos 25%, lo que implica que se amplíe el plazo remanente hasta 50% del plazo original, así como disminuir la tasa de interés y hacer quitas de capital.

Por ello, autoridades financieras implementarán cuatro nuevas medidas para permitir a bancos y otros intermediarios financieros reestructurar los créditos de los clientes que así lo soliciten.

  • Computar un monto menor de reservas específicas cuando se pacte una reestructura con el cliente.
  • Reconocimiento de las reservas específicas que se liberen por la reestructura de un crédito como reservas adicionales.
  • Podrán reconocer un mayor capital regulatorio al considerar las reservas adicionales como parte del capital complementario.
  • Reducir prudentemente los requerimientos de capital por riesgo de crédito.

Adicionalmente, para incentivar la inclusión financiera y el otorgamiento de nuevos créditos se realizarán las siguientes tres medidas en el caso de los bancos:

  • Se extiende el uso del buffer de capital hasta el 31 de diciembre de 2021.
  • Se amplían los requerimientos de liquidez hasta marzo de 2021, con lo que los bancos podrán reducir transitoriamente sus buffers de liquidez por debajo de 100% de sus necesidades.
  • Se amplía a personas morales la regulación que permite la apertura de cuentas y contratación de créditos sin necesidad de que el cliente vaya a la sucursal.
  • Se eliminan los límites establecidos para la contratación de créditos y apertura de cuentas facilitando la apertura de cuentas de identificación simplificada consideradas de bajo riesgo para SOFIPOs y SOCAPs.

“Este paquete de medidas no sólo busca otorgar un alivio en la economía de los clientes beneficiarios, sino que contribuye a la recuperación económica del país proveyendo liquidez a familias y empresas”, dijo Hacienda.

Los primeros apoyos

Durante los meses de marzo y abril de este año, la CNBV emitió los Criterios Contables Especiales (CCE) para que entidades financieras pudieran implementar y ofrecer diversos programas de apoyo a sus clientes frente a los efectos económicos de la contigencia.

“Desde el inicio de la pandemia causada por COVID-19, el Gobierno de México ha implementado diversas acciones para mitigar los efectos sobre la economía de las familias y empresas derivados de las medidas sanitarias indicadas por las autoridades del Sector de Salud”, destacó Hacienda a través de un comunicado de prensa.

Las medidas de alivio temporal consistieron en el diferimiento parcial o total del pago de intereses o de capital por 4 o 6 meses, y 18 meses para créditos dirigidos al sector agropecuario o rural, todo ello sin la generación de intereses adicionales, cobro de comisiones por reestructuras, solicitud de garantías adicionales ni la restricción o cancelación de líneas de crédito, entre otras.

Hasta ahora, más de 8.6 millones de créditos se apegaron a los CCE, lo que representa alrededor del 17% de la cartera bancaria y ha resultado en un alivio financiero para familias y empresas.

Sin embargo, la pandemia se extendió más de lo esperado y por ello Hacienda acordó aplicar nuevas medidas para proteger la economía de personas y empresas que lo requieran.