La imposición de aranceles del 25% por parte del gobierno de Estados Unidos, a partir de este 4 de marzo, cayó como un balde de agua fría para el sector empresarial de México. La iniciativa privada ya señaló que dicha medida no solo representa una violación al T-MEC, sino que también podría derivar en una recesión económica y la pérdida de miles de empleos.
La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) fue una de las primeras en reaccionar a la publicación del documento de los Estados Unidos, calificando la decisión del gobierno de Donald Trump como un riesgo para la estabilidad económica de México.
Lamentamos esta determinación, ya que contradice los principios del T-MEC y genera incertidumbre en los sectores productivos
señaló el organismo empresarial.
El presidente de Coparmex, Juan José Sierra Álvarez, advirtió que los aranceles podrían empujar a México hacia una recesión, además de presionar el tipo de cambio, que podría superar los 22 pesos por dólar, impactando directamente en los costos de producción y en el poder adquisitivo de las familias.
La postura de la American Society
Precisamente, el presidente de la American Society of Mexico, Larry Rubin, señaló que estas medidas arancelarias complican el panorama de cara a la próxima revisión del T-MEC, un acuerdo fundamental para la competitividad regional.
En este contexto, subrayó la importancia de que México adopte un enfoque proactivo y colaborativo para prevenir retrocesos que puedan afectar el crecimiento económico y la relación comercial entre ambos países.
Confiamos plenamente en el liderazgo constructivo y la sensibilidad tanto del presidente Donald Trump como de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo. Sabemos que darán un ejemplo al mundo en materia de resolución de diferencias y resiliencia, impulsando el bien común de sus ciudadanos
dijo.
Por su parte, el Consejo Nacional de la Industria Manufacturera de Exportación (Index) alertó sobre las consecuencias inmediatas de las tarifas, señalando que miles de empleos quedarán desprotegidos, mientras que las cadenas de suministro se verán afectadas en un momento clave para la relocalización de inversiones en México.
Trump ignoró la voluntad de México
Coparmex también lamentó que el gobierno de Trump ignorara la disposición del gobierno de Claudia Sheinbaum para dialogar sobre soluciones a la crisis del fentanilo y la migración, a fin de evitar la imposición de aranceles.
Sin embargo, la imposición final de estas medidas evidencia una falta de compromiso con la cooperación y el respeto a los acuerdos comerciales por parte del gobierno de Estados Unidos. A nivel político, la decisión impone presiones adicionales a México en materia de seguridad y migración, temas que han sido utilizados como condicionantes en la relación comercial
sostuvo el organismo.
Se tiene que analizar si aplicar aranceles en respuesta
Aunque aún existe la posibilidad de que México responda con contramedidas arancelarias, Coparmex insistió en que cualquier decisión en este sentido debe estar respaldada por un análisis riguroso, para evitar represalias que puedan agravar la situación.
Por su parte, Index aseguró que trabajará para restablecer las condiciones que permitan seguir operando bajo las reglas pactadas en el T-MEC.
En tanto, la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco) de la Ciudad de México hizo un llamado a los sectores productivos del país a mantener la calma y actuar con prudencia ante la incertidumbre generada por esta medida.
Las relaciones comerciales de las naciones no deben estar basadas en la incertidumbre, valor contrario a la estabilidad de los mercados. Insistimos en que el primer principio de los acuerdos comerciales debe ser el respeto
enfatizó la Canaco.
Esta historia se actualizó a las 13:54 horas.
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