Durante el 2023, el optimismo de la iniciativa privada (IP) en México alcanzó cifras récord, apoyado principalmente por el nearshoring, la recuperación total tras la pandemia y las obras insignia del gobierno federal.
De acuerdo con datos desestacionalizados del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el Indicador de Confianza Empresarial (ICE) alcanzó un promedio de 54.70 puntos durante el año pasado.
Este índice significó el mayor nivel desde que se tienen registros, además de representar un crecimiento anual de 8.1%, superior al alza de 3.2% que se observó en el 2022.
Los cuatro sectores, al alza
Dentro del ICE, los cuatro sectores económicos presentaron sus mejores resultados en todo el 2023: Construcción, manufactura, comercio y servicios no financieros.
El indicador referente a la construcción alcanzó 52.61 puntos, obteniendo un aumento anual de 4.4%; a su interior, el mayor incremento fue en el momento adecuado para invertir, con una tasa de 48.7%.
En tanto, de sus cinco componentes, sólo se mostraron caídas, que representan desconfianza por parte de la IP, en la situación económica futura del país (1.7%) y de la empresa (3%).
El principal factor de crecimiento de la producción industrial se debe al componente de la construcción, que se debe a una combinación de las tendencias de relocalización y a las obras insignia de la actual administración
mencionaron analistas de Citibanamex en un reporte.
Recuperación automotriz
El ICE del sector manufacturero llegó a 53.44 puntos en el 2023, que significó un ascenso anual de 3.8%, impulsado por la industria automotriz, dejando atrás, por el momento, la crisis de semiconductores.
De esta rama económica, destaca que solamente el indicador sobre la situación económica futura de la empresa retrocedió, con una baja de 0.1%.
Los estrategas de Citibanamex agregaron que si bien el crecimiento ha sido relativamente generalizado, hay algunas señales de alerta, principalmente en la reducción marginal de las manufacturas no automotrices, vinculadas a las estadounidenses, que se han mantenido estancadas en el año.
Consumo, con fortaleza
Del lado del consumo, el ICE del comercio, con 55.51 puntos, creció 2.3%, mientras el de servicios privados no financieros, con 55.30 puntos, lo hizo en 14.3%.
En el comercio, únicamente disminuyó el índice sobre la situación económica futura del país (1.6%); por su parte, en servicios, todos sus componentes exhibieron variaciones positivas, resaltando el de momento adecuado para invertir (44.3%).
Los crecimientos que han mostrado el empleo y los salarios reales, principalmente en el sector formal, así como el aumento de las remesas en dólares y la recuperación del crédito habrían favorecido al consumo en prácticamente todo el país
escribieron analistas del grupo financiero.
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