Las principales desarrolladaras de vivienda social alistan sus estrategias para no depender del monto de subsidios entregado del gobierno.
En 2018 el programa de subsidio a la vivienda logró consolidar 109.6 mil acciones en el país, con un monto de 5,694.9 millones de pesos, según datos del Sistema Nacional de Información e Indicadores de Vivienda.
No obstante, los organismos de vivienda decidieron recortar el monto destinado a este rubro para el ejercicio de 2019, lo cual generó preocupación entre miembros de la industria, pues consideraron que la reducción hasta 400 millones de pesos afectaría al sector.
Al cierre de 2018, la desarrolladora Cadu reporte la escrituración de 2,035 viviendas a clientes con subsidio, una disminución equivalente al 34.4% en comparación de las entregadas bajo el mismo mecanismo en 2017.
En su reporte del cuarto trimestre del 2018, sus directivos indicaron que esperan que la disminución en el monto de los recursos limite el crecimiento del segmento, por lo cual a lo largo de 2019 consolidarán vivienda media y residencial.
Estimamos ver un incremento en el segundo trimestre del año en la colocación de vivienda social. Hay que tener paciencia pues se están dando cambios importantes en los organismos de vivienda comentó Pedro Vaca Elguero, presidente y director general de Cadu durante la conferencia telefónica con analistas.
Detalló que el sentimiento positivo deriva de la decisión de Infonavit de revisar el monto de crédito hacia un eventual incremento.
“Es un cambio estructural la eliminación de los subsidios, pero se compensará con créditos a derechohabientes. Eso es una gran noticia porque de otra manera estábamos supeditados a los presupuestos que diera el gobierno. De esta manera un aumento en el monto de crédito es algo que se queda para siempre, por eso lo vemos con mucho optimismo”, expuso el directivo.
En el caso de Vinte, sus directivos expresaron no “contar con una dependencia del presupuesto federal de subsidio”, pues durante el año pasado la venta de vivienda con subsidio ascendió a 4% del total.
La empresa reportó un incremento de ingresos de 8.7% con respecto al año anterior, lo cual se dio gracias a que el precio medio de las viviendas que desarrolla superó por primera vez el techo de los 700,000 pesos.
Al 31 de diciembre de 2018, mantuvimos el mismo número de viviendas en obra que al cierre de 2017, sin embargo, el precio promedio de estas viviendas es de un 29% más alto, debido a la mezcla de vivienda social, media y residencial
, destaca el reporte del 4T2018.
Por otro lado, Homex reportó ingresos de 1,074.2 millones de pesos frente a los 422.3 millones que obtuvieron en 2017.
Eso se debió a que la vivienda de segmento medio pasó de representar 16% de la colocación en 2017 a 31% en 2018, con un precio promedio por unidad de 567 mil pesos.
“Como resultado de la implementación de una estrategia de competitividad se logró reducir la dependencia en los subsidios federales, sin perder el mercado de interés social, al mismo tiempo que logramos aumentar nuestra participación en el segmento de vivienda media residencial, lo cual se refleja en el precio promedio de todas las viviendas para el año”. Así, el segmento de interés social y vivienda media tuvieron el mismo porcentaje de participación en la mezcla de la compañía.
Al cierre del 2018, Sare reportó ingresos por 311.6 millones de pesos, un monto 0.9% menor a los 314.4 millones registrados en 2017, con un total de 840 viviendas escrituradas.
Adicionalmente, indicaron haber generado un Ebitda negativo de 1.5 millones de pesos en el acumulado anual.
Los directivos de la empresa dijeron en su reporte financiero que les han impactado por factores como el alza de tasas en Estados Unidos. “El efecto de arrastre que ha tenido en México ha encarecido mucho el crédito y para un sector como el de construcción de vivienda que es intensivo en el uso de deuda y eso tiene un fuerte impacto en los resultados”, expusieron.