Las pensiones que brinda el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) crecen considerablemente cada año lo que implica que el gobierno federal destine más recursos al pago de las mismas.
La gran mayoría del pago de pensiones del IMSS se centra en el régimen 1973, un esquema de reparto. Para este año destinarán 663,714 millones de pesos, esto es un crecimiento anual de 12.8% en términos reales.
El pago de las pensiones del régimen 1973 absorbe el 49% del 1.34 billones de pesos del presupuesto total del IMSS para este año.
El gasto destinado a ese pago de pensiones es 2.1 veces mayor a lo que IMSS destinará a la atención a la salud en el 2024 (314,700 millones de pesos).
Pensiones y reforma de AMLO
En unos días el presidente Andrés Manuel López Obrador revelará su propuesta de reforma al régimen 1997, el de las administradoras de fondos para el retiro (afores), creado para sustituir el régimen de 1973.
En la reforma se buscará incrementar las aportaciones a la cuenta afore de los trabajadores con ayuda del gobierno federal. El gasto generaría más presión a las finanzas públicas.
De los 9 billones de pesos que se destinarán al gasto público, más del 20% (1.9 billones) son para pensiones contributivas y no contributivas para 2024.
Analistas y expertos en la materia consideran que una reforma de pensiones también debe de incluir al régimen de 1973 del IMSS porque es inviable desde el punto de vista de finanzas públicas.
El profesor de la Escuela de Gobierno del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, Héctor Villareal, comentó que arreglar el sistema de afores es arreglar el régimen del 1973.
Medidas soft y hardcore
Aunque es complicado modificar el régimen de 1973 de IMSS, por el costo político/electoral, eso no implica discutir y plantear medidas “softcore” y “hardcore”.
Las medidas softcore, dijo Villareal, se trata de revisar y eliminar la “Modalidad 40 del IMSS” o incluso hacer auditorías para evitar que “fallecidos” cobren una pensión o revisar a personas que tienen una pensión que no les corresponde, declaró.
En el caso de las medidas hardcore está que el gobierno tope el cobro de pensión de hasta 30,000 pesos, salvo que el trabajador compruebe con las aportaciones correspondientes.
Régimen de transición
Arreglar el régimen de 1973 es complejo políticamente, pero lo que puede ser realista es terminar con el régimen transición y realizar algo similar a la reforma del ISSSTE con el bono de pensión, dijo Villareal.
Políticamente complicado y no es fácil, pero si vamos a discutir todo, vamos a discutir todo
dijo.
En la reforma a la Ley del ISSSTE los trabajadores que decidieron migrar al sistema de las afores reciben un bono de reconocimiento de antigüedad en su cuenta individual.
El problema es que si el gasto en pensiones del sistema viejo (de 1973) sigue creciendo a esa tasa y con una generación de transición tan larga el problema es que vamos a tener un par de sexenio amarrados fiscalmente
comentó.
Las reformas en pensiones del IMSS de 1997 y del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) de 2007 crearon una generación de transición que recibe pensiones del esquema de reparto.
El trabajador que se retira bajo el régimen 1973 recibirá de 75% a 95% de su pensión si lo hace de 60 a 64 años por cesantía en edad avanzada. Sin embargo, recibirá el 100% de su salario si lo realiza a los 65 años por concepto de vejez.
La generación de transición alcanzará un punto máximo en 2050, de acuerdo con estimaciones y el último pago de reparto se realizará en 2120, de acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación.
Reforma a los cuatro pilares
Alejandra Macías Sánchez, directora ejecutiva del Centro de Investigación Económica (CIEP), mencionó que la reforma a pensiones que propuso el presidente López Obrador tiene que ser por un esquema mixto donde se incluyan los 4 pilares del sistema de pensiones.
El pilar cero es de la pensión no contributiva; el pilar 1, reparto; pilar 2, capitalización individual; y pilar 3, ahorro voluntario.
Macías Sánchez comentó que contar con 4 pilares desligados entre sí “hace más difícil hacer un sistema de pensiones más consolidado, más igualitario y transparente”.
También mencionó que una integración entre los pilares haría más eficiente el gasto pensionario a los trabajadores. La reforma de los 4 pilares debe de ir acompañada por una especie de Instituto Nacional de Pensiones que tenga la capacidad de vigilar los más de 3,000 esquemas pensionarios en el país.
Necesitamos una entidad para las pensiones y un consejo fiscal. Que la rectoría en materia pensionaria estipule los requisitos que se necesitan y los beneficios que se pueden dar para no tener problemas en los municipios o universidades que prometen pensiones y después no pueden pagar. Después quien rescata es el estado y la Federación
mencionó.
¿Cómo financiar las pensiones?
El director de economía sostenible del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), Jesús Carrillo, comentó que las personas que retiraron y se van a retirar para el régimen 1973 seguirán representando un costo para las finanzas públicas.
El trabajo que hay que hacer es cómo le hacemos para que el Estado Mexicano recaude más y no le tenga que hacer frente a esas pensiones contributivas con deuda. Hacia dónde nos dirigimos con esas pensiones contributivas y no contributivas es a una presión a las finanzas públicas más grande
explicó.
Diversas Organizaciones de la Sociedad Civil han remarcado la importancia de que el próximo gobierno realice una reforma fiscal para incrementar los ingresos del gobierno federal y cubrir las necesidades del gasto público.
Más que pensar en sólo conseguir dinero para las pensiones es conseguir más recursos para el Estado porque de ahí sale todo. El gasto en pensiones, inversión, gasto federalizado, etcétera
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