Netflix invertirá 200 millones de dólares entre 2019 y 2020 para realizar 50 producciones en México, dijo el director ejecutivo y cofundador de la compañía, Reed Hastings, este viernes.

No solo se utilizará para producir series mexicanas que se consuman en México, sino también otras que se puedan consumir en todo el mundo,

señaló el empresario durante su participación en el evento México Siglo XXI, de la Fundación Telmex-Telcel.

Hastings recordó que la serie mexicana Club de Cuervos, lanzada en 2015, fue su primera producción internacional.

Dijo que decidió apostar por ella luego de ver la película Nosotros los nobles (2013) y sumergirse en el humor mexicano.

“En todas nuestras producciones queremos hacer algo ligeramente más innovador”, manifestó.

Aseguró que una de sus aspiraciones es la de conectar a las personas a través del entretenimiento, por la cual no duda en apostar por nuevos contenidos fuera de Estados Unidos.

Destacó además el interés de la compañía por crear contenidos en todo el mundo.

 

La filosofía de tomar riesgos

Hastings fundó Netflix junto con Marc Randolph en 1998 y la compañía ofrecía servicios de renta de películas en DVD por correo a una tarifa fija. La empresa tenía 30 empleados y 925 títulos disponibles.

“Siempre quisimos que Netflix fuera la compañía de entretenimiento de internet, por eso le pusimos ese nombre y no ‘DVD por correo’, pero en 1997 la velocidad todavía era muy baja”, recordó.

La idea para apostar por el entretenimiento en un canal que todavía no existía se dio antes de la fundación de Netflix, cuando Hastings comenzó a trabajar en una empresa digital, “la primera punto com”, que ya no existe.

Desde mediados de 1990 tuve la noción de que el internet crecería y sería más rápido cada vez,

expresó el empresario.

Esa filosofía de emprendimiento y la propensión de innovar y asumir riesgos ha acompañado a la empresa durante sus dos décadas de existencia.

“Nuestra compañía se optimiza apoyando el trabajo comunitario. Tenemos pocos controles, apoyamos la creación comunitaria”, agregó Hastings.

Además, aseguró que en la empresa no se tiene miedo al error, ni se piensa que la gente deba ser despedida por equivocaciones.

“Hemos tomado muchas decisiones temerarias a lo largo de los años”, como cuando en 2011 la firma decidió separar los servicios de DVD y aumentar los precios de manera agresiva. Esta medida le hizo perder tiempo.

“Pasamos de ser amados a odiados, pero mejoramos y ahora tenemos más de 60 millones de usuarios solo en Estados Unidos”, resaltó.

Hastings, de 58 años, también forma parte de las juntas directivas de Facebook y de organizaciones sin fines de lucro.