La candidata por la alianza Fuerza y Corazón por México (PRI, PAN y PRD), Xóchitl Gálvez, dijo que de llegar a la Presidencia de la República, cerrará las refinerías de Cadereyta, Nuevo León, y Tampico, Tamaulipas (que en realidad se encuentra en Ciudad Madero), pertenecientes a Petróleos Mexicanos (Pemex).

A través de su cuenta de X, la exsenadora argumentó que con la medida busca proteger la salud de más de 6 millones de personas, la cuales se ha visto mermada por la contaminación de dichas instalaciones.

Las refinerías de Cadereyta y Tampico cerrarán definitivamente en los primeros 6 meses de mi gobierno

señaló.

La aspirante presidencial también se dirigió a los trabajadores de ambas refinerías, quienes quiso compartirles un mensaje de tranquilidad, al asegurar que ninguno va a perder su fuente de empleo. “Sus derechos laborales no serán afectados por esta decisión”, dijo la candidata.

Críticas de Xóchitl Gálvez a la refinería de Cadereyta

En una publicación posterior, donde corrigió el dato de la refinería de Tamaulipas, explicó que las instalaciones de Cadereyta se encuentran a tan sólo 40 kilómetros de la Zona Metropolitana de Monterrey y son la principal fuente fija de contaminación, así como la primera causa de enfermedades respiratorias para los 5.3 millones de habitantes de la ciudad.

Gálvez agregó que la refinería de Cadereyta produce el 90% del dióxido de azufre que se esparce en diversos municipios neoleoneses, incluyendo las zonas ubicadas al este de Coahuila, y la mortalidad asociada a causas respiratorias alcanza los 1,880 casos de muertes prematuras al año.

Por último, señaló que es necesario modernizar todo el sistema de refinerías para hacerlo más eficiente y amigable con el medio ambiente, y aseguró que las refinerías ya no son negocio actualmente, ya que por cada barril de petróleo convertidor en gasolina, el gobierno pierde dinero.

Tan sólo entre 2020 y 2022, ¡¡¡Cadereyta perdió 4,000 millones de pesos y Madero 26,000 millones

se lee en la publicación.

Gobierno de Nuevo León clausura refinería de Cadereyta

A principios de marzo, la refinería de Cadereyta fue clausurada de manera definitiva por el Gobierno de Nuevo León, debido a que se negó a colaborar con la Secretaría de Medio Ambiente estatal.

En un comunicado, el gobierno liderado por Samuel García explicó que la refinería en Cadereyta tenía una “ostensible y notoria emisión de contaminantes a la atmósfera”, por lo que afecta a la población.

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