Este 22 de diciembre, el presidente Andrés Manuel López Obrador inaugura la llamada “Línea Z” del Tren de Pasajeros del Istmo (tramo Salina Cruz-Coatzacoalcos) en el estado de Oaxaca. El sábado se trasladará al estado de Veracruz para inaugurar el tramo Coatzacoalcos-Teapa.
El Tren de Pasajeros del Istmo forma parte del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT) que, según las secretarías del Bienestar y Economía, buscará convertirse en un enclave de desarrollo en el sureste mexicano, así como una alternativa económica para aliviar parte de la saturación en el Canal de Panamá.
El próximo año el gobierno federal prevé invertir 5 mil 433 millones 990 pesos, según el monto aprobado en el Proyecto de Egresos de la Federación 2024. Además contará con una bolsa de 574 millones de pesos para obras ejecutadas por la Secretaría de Marina (Semar).
El CIIT contempla crear una zona de incentivos fiscales, desarrollo de infraestructura (carretera, aeroportuaria, marítima y ferroviaria), promoción de inversiones y vinculación comercial, donde ya obtuvieron licitaciones las constructoras Mota-Engil, Urcedic, Profharmax y Comexsa.
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La Secretaría de Hacienda anunció en septiembre pasado que las empresas que se instalen en el área, recibirán descuentos fiscales del 100% durante los primeros tres años, y a partir del cuarto al sexto año recibirán un 50% o 90%, dependiendo si mantienen o superan los niveles de empleo.
Mientras el gobierno federal festeja su nueva obra, la delincuencia organizada y los conflictos comunitarios también acechan el proyecto, prácticamente desde que fue concebido; y que junto al Tren Maya, la refinería Dos Bocas y el Aeropuerto Federal Felipe Ángeles (AIFA), simbolizan los proyectos clave del presente sexenio.
Conectividad industrial en el sureste
Según el “Programa Institucional del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec 2023-2024”, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 3 de julio de 2023, el gobierno del presidente López Obrador propone la creación de un ambicioso “Corredor Multimodal” que conectará el océano pacífico y el Golfo de México, pero que se ampliará gradualmente a otros estados.
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Dicho proyecto propone una “conversión industrial del Istmo”, según documentos oficiales consultados por EL CEO, y buscará mejorar el tránsito de bienes y personas dentro de un amplio polígono comprendido entre Salina Cruz, Oaxaca, Coatzacoalcos, Veracruz, Dos Bocas, Tabasco y Puerto Chiapas, Chiapas.
Por su parte la Secretaría del Bienestar sostiene que el proyecto impactará directamente a 79 municipios de los estados de Veracruz y Oaxaca que poseen 60% de población en condiciones de pobreza y 15.5% en pobreza extrema.
El CIIT sustituyó a las Zonas Económicas Especiales (ZEE), proyecto impulsado por la pasada administración federal –cancelado desde abril de 2019– bajo el argumento de su “falta de planeación con visión de mediano y largo plazo”, conectividad, desarrollo de infraestructura así como la “poca participación de los dos puertos en el comercio nacional e internacional”.
Promete superar los proyectos fallidos de sexenio pasados, como el Plan Alfa-Omega (de José López Portillo), el modelo de Administración Portuaria Integral (de Carlos Salinas de Gortari), el Programa Integral de Desarrollo Económico para el Istmo (de Ernesto Zedillo) y el Plan Puebla Panamá (de Vicente Fox).
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En una primera etapa, el CIIT implementará la “modernización” de los puertos de Coatzacoalcos, en Veracruz y Salina Cruz, en Oaxaca, con el fin de que éstos brinden servicios de carga, transporte, almacenaje, embalaje y servicios diversos logísticos, bajo la dirección de la Secretaría de Marina (Semar).
Por otra parte el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024, estima rehabilitar 207.4 km de vías férreas, de los cuales, 109 kilómetros se encuentran concesionados a Ferrosur, propiedad de Grupo México; el tramo Coatzacoalcos-Cosoleacaque fue ocupado por elementos de la Semar, en mayo pasado, tras un polémico decreto presidencial que justificó su expropiación (aunque después el gobierno y Germán Larrea entraron en negociación para indeminzar al empresario).
El proyecto ejecutivo del CIIT también prevé la rehabilitación de una red de caminos en la región que abarca 7,328 kilómetros, entre ellos, 4 carreteras de cuota, 7 federales libres y una gran cantidad de caminos rurales libres. Algunos bajo la intervención de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SITC) y otras más, bajo la coordinación de los gobiernos locales.
Además se implementa de la reparación y ampliación de la infraestructura de energía eléctrica existente, a cargo de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), junto a mejoras comerciales e infraestructura al aeropuerto de Minatitlán, operado por la compañía Grupo Aeroportuario del Sureste (ASUR).
Según el gobierno federal, el desarrollo y rehabilitación de puertos, carreteras, aeropuerto y vías férreas, se desarrollará transexenalmente con el objeto de fortalecer el “mercado interno y generar los encadenamientos productivos que permitan impulsar el bienestar de la población y el crecimiento regional”.
Polos de Desarrollo para el Bienestar
Además del desarrollo de infraestructura de conectividad, el CIIT prevé la construcción de nueve “polígonos” industriales –en un principio se anunciaron diez– que “contarán con incentivos para atraer la inversión que detone el desarrollo económico y social de la región”, ubicados alrededor de las vías férreas construidas, así como carreteras y puertos del Istmo.
El 2 de mayo pasado, el vicealmirante Raymundo Pedro Morales, director general del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, junto con la Comisión de Mejora Regulatoria (Conamer), publicaron los decretos para la creación de seis “Polos de Desarrollo para el Bienestar” (PODEBI) que se construirán en Veracruz y Oaxaca.
“Tenemos una empresa que viene de Dinamarca y que va a instalar en Ixtepec una inversión importante de energía limpia, a través de hidrólisis para producir hidrógeno verde, que posteriormente, extrayendo el nitrógeno de la atmósfera, va a producir amoniaco par amoniaco verde”, adelantó Morales, sin especificar el nombre de la compañía.
El gobierno también busca atraer inversiones especializadas en electricidad y electrónica, semiconductores, automotriz, farmacéutica, dispositivos médicos, agroindustria, generación de energías limpias, maquinaria y equipo, tecnologías de la información y comunicación, metales y petroquímica.
Los primeros seis “Polos de Desarrollo para el Bienestar” anunciados, son:
- El PODEBI de Coatzacoalcos I, un polígono de 257.70 hectáreas apostadas sobre la carretera federal Coatzacoalcos-Villahermosa (en Veracruz), con un posible impacto económico en los municipios de Nanchital de Lázaro Cárdenas del Río, Cosoleacaque, Moloacán, Agua Dulce y Pajapan (de la misma entidad).
- El PODEBI de Coatzacoalcos II, un polígono de 131.82 hectáreas frente al puerto marítimo de Coatzacoalcos (Veracruz), con un posible impacto económico en los municipios de Nanchital de Lázaro Cárdenas del Río, Cosoleacaque, Moloacán, Agua Dulce y Pajapan (de la misma entidad).
- El PODEBI de Texistepec, un polígono de 462.39 hectáreas ubicado en el municipio el municipio homónimo ubicado sobre la autopista La Tinaja-Cosoleacaque (Veracruz), con un posible impacto económico en los municipios de Soconusco, Jáltipan de Morelos, Hidalgotitlán, Jesús Carranza, Sayula de Alemán y Oluta (de la misma entidad).
- El Podebi de Salina Cruz, un polígono de 82 hectáreas ubicado en Salina Cruz y a tres kilómetros de las vías férreas (Oaxaca), con un posible impacto ambiental en los municipios de Santo Domingo Tehuantepec, San Pedro Huilotepec y San Mateo del Mar (de la misma entidad).
- El PODEBI de San Blas Atempa, un polígono de 331 hectáreas ubicado en el municipio homónimo cercano a las vías ferreras (Oaxaca), con un posible impacto económico en los municipios de San Pedro Comitancillo, Asunción Ixtaltepec, Juchitán de Zaragoza, Santa María Xadani, El Espinal, Santo Domingo Tehuantepec y San Pedro Huilotepec (de la misma entidad). (Al ser un municipio mayoritariamente indígena, el gobierno emplazó a una consulta pública que ganó la mayoría de representantes comunitarios; no obstante, en julio del presente año, un juzgado federal otorgó una suspensión definitiva contra el proyecto).
- El PODEBI de San Juan Evangelista, un polígono de 360.25 hectáreas ubicado en el municipio homónimo a 3.5 kilómetros de la vía férrea (Oaxaca), con un posible impacto económico en los municipios de San Juan Cotzocón y Santiago Yaveo (de la misma entidad), así como Juan Rodríguez Clara, Acayucan, Sayula de Alemán, Jesús Carranza, Playa Vicente (en Veracruz).
El pasado 22 de noviembre, el gobierno federal anunció los resultados de las primeras licitaciones, encargadas de construir la infraestructura necesaria para el desarrollo de los PODEBI.
La constructora Mota-Engil, que preside José Miguel Bejos, fue la principal ganadora del primer paquete, al obtener tres de las cinco licitaciones lanzadas por el gobierno: Coatzacoalcos I, Coatzacoalcos II y Salina Cruz, los dos primeros ubicados en Veracruz y el tercero en Oaxaca.
Dicha empresa fue una de las participantes en la construcción del Tren Maya (tramo 1), uno de los proyectos prioritarios del gobierno, pero también está involucrada en proyectos como el Metro de Monterrey y el Aeropuerto Internacional de Puerto Escondido.
En tanto, Grupo Constructor Urcedic ya se encuentra a cargo del polo San Juan Evangelista mientras que, las compañías Profharmax y Transportadora Comexsa se encarga del de Texistepec, todos ellos localizados en Oaxaca.
El pasado 12 de diciembre la dirección general del CIIT, lanzó la licitación pública para la construcción de cuatro PODEBI más, cuyos resultados serán dados a conocer el 12 de abril de 2024: Ciudad Ixtepec, Santa María Mixtequilla, Matias Romero Avendaño y Asunción Ixtaltepec.
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Actualmente las empresas interesadas en la segunda etapa de los PODEBI, se encuentran en proceso para presentar la documentación para participar en dicha licitación.
CIIT, las dudas
No obstante, los “Polos de Desarrollo para el Bienestar” han estado acosados por la ejecución de diversos delitos y conflictos comunitarios, prácticamente desde que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció su construcción.
Los más recientes:
Según un informe del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), entre octubre del 2021 y marzo del 2023, dicha organización contabilizó 26 agresiones en contra de defensores de derechos humanos y territorio, derivado del ordenamiento industrial que promueve el gobierno federal.
“El CIIT se está ejecutando sobre territorios indígenas sin que el gobierno federal haya obtenido el consentimiento previo, libre e informado de las comunidades indígenas y equiparables para dicho proyecto, como se ha demostrado en los peritajes de las acciones jurídicas interpuestas ante el Poder Judicial de la Federación”, señaló un informe.
Los conflictos comunitarios ya han escalado a instancias judiciales, la Asamblea de los Pueblos Indígenas del Istmo en Defensa de la Tierra y el Territorio (APIIDTT), en representación de la comunidad indígena Binniza de Puente Madera, logró detener provisionalmente –por vía del amparo– la construcción del PODEBI de San Blas Atempa, proyecto ubicado en el municipio homónimo en el estado de Oaxaca.
Por su parte el capitán de fragata Iván García Álvarez, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana en el estado de Oaxaca, advirtió en junio pasado que existe una pugna entre los cárteles Jalisco Nueva Generación (CJNG) y Sinaloa (CDS), por “tener control del Transístmico por la gran cantidad de economía que se está manejando en esa zona”.
Entre el 11 de julio de 2022 y el 3 de mayo pasado, el Consejo de Seguridad Nacional (CSN) declaró como objetos “de seguridad nacional e interés público”, tanto el Tren Maya y el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec. Por lo que la vigilancia y salvaguarda de sus instalaciones han sido encargadas a las Fuerzas Armadas y la Guardia Nacional.
