Las crecientes tensiones con los agricultores pueden convertirse en un obstáculo para el partido gobernante de México en las elecciones de 2024, dijeron expertos, mientras crece la molestia por los bajos precios de los granos, un conflicto comercial con Estados Unidos y la aparente falta de apoyo del gobierno federal.
En los comicios de junio del próximo año, donde el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) es favorito, no sólo se elegirá al nuevo mandatario, sino también decenas de escaños en el Congreso y el Senado, gobernadores y puestos en municipios locales.
Las desavenencias con el sector podrían derivar en una grieta poco común en la formidable popularidad de AMLO, consistentemente por encima del 60% a lo largo de su mandato.
Los productores cerraron este mes un aeropuerto internacional en Sinaloa para exigir al gobierno que garantice los precios del maíz, el trigo y el sorgo. Una caída en los precios internacionales de los granos durante el último año está acabando con sus medios de vida, denunciaron.
El maíz más activo y los contratos de trigo en la Bolsa de Comercio de Chicago (CBOT, por sus siglas en inglés) han fluctuado, pero ambos han bajado 21% en comparación con hace un año, ya que las preocupaciones sobre el suministro global han disminuido.
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Disputa comercial sobre el maíz transgénico
Las manifestaciones se producen en medio de una disputa comercial con Estados Unidos por un decreto de López Obrador para limitar el uso de maíz genéticamente modificado, particularmente para el consumo humano. Casi todas las importaciones provienen de proveedores estadounidenses.
De acuerdo con Bosco de la Vega, expresidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA) -el grupo agroindustrial más importante del país, con una gran masa de votantes, particularmente en estados como la capital del maíz, Sinaloa-, el sector agroalimentario mexicano representa alrededor del 14% de la fuerza laboral formal del país.
Ese sector no está con este gobierno. Puede ser un problema relevante tanto para las elecciones como para que (la actual administración) tenga un conflicto importante en varias ciudades del país
dijo De la Vega.
El problema de los precios es urgente, ya que los productores de maíz del norte están cosechando ahora, muchos sin ningún lugar donde vender sin sufrir pérdidas. Para los que tienen la suerte de contar con espacio de almacenamiento, hay montañas de granos en los depósitos de todo el país.
AMLO, quien ha priorizado la ayuda a los pobres durante su mandato, afirmó que los manifestantes son en su mayoría grandes productores, no pequeños agricultores a los que su administración intenta ayudar. Además calificó las protestas como “chantaje” y se ha negado a negociar con los manifestantes.
Es poco probable que los agricultores sean partidarios de alguno de los principales aspirantes presidenciales de Morena: Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y Adan Augusto. Los tres son generalmente reacios a desafiar las políticas de López Obrador, quien está limitado a un mandato por la Constitución mexicana.
No es el primer roce entre esta administración y el sector agropecuario. En 2020, enfrentamientos entre agricultores y la policía militar en Chihuahua, entidad propensa a la sequía, provocaron el fallecimiento de una mujer durante las protestas por un plan para desviar agua adicional a Estados Unidos.