Con la llegada de la pandemia por COVID-19 en 2020, México y el mundo han presenciado diferentes acontecimientos, entre ellos, el aumento en los contagios por la aparición de nuevas variantes, hasta la incertidumbre por la llegada de una cuarta ola.
Ante estos sucesos, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, se ha encargado de mantener informada a la población sobre el avance del coronavirus; además de que el día de ayer, anunció que se registraron 23 casos de la nueva variante ómicron en México, la cual se dio a conocer el mes pasado.
De los 23 posibles casos de ómicron en México, el 70 por ciento se trataba de personas no vacunadas, lo que nos lleva a recordar que vacunarse es la principal medida de prevención de enfermedad en la epidemia de #COVID19. pic.twitter.com/n0qmBCgV7c
— Hugo López-Gatell Ramírez (@HLGatell) December 21, 2021
Sin embargo, esta noticia no es la única que ha sorprendido a los mexicanos, ya que, desde que inició la pandemia el año pasado, se han distinguido distintas posturas en los argumentos del subsecretario de Salud.
Te puede interesar: OMS recomienda no tener fiestas de Navidad por contagios de ómicron
Primer caso
Para el 28 de febrero de 2020, Gatell confirmó el primer caso de coronavirus en México, advirtiendo a la ciudadanía sobre la adopción de medidas de higiene como el lavado de manos de manera frecuente y el uso de gel antibacterial.
En marzo del 2020, cuando no se tenía claro el impacto que generaría el COVID-19, Gatell anunció que no habría restricción de eventos masivos, a excepción de los lugares donde hubiesen casos de transmisión comunitaria.
Además de asegurar que tomar medidas como la suspensión de actividades colectivas no era necesario en México, dado que el país se encontraba en una primera fase de la pandemia
No obstante, López-Gatell hizo un llamado para que a las personas vulnerables como los adultos mayores, menores de cinco años, mujeres embarazadas o gente con enfermedades cardiovasculares, se les diera prioridad para realizar pruebas de coronavirus en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER).
Asimismo, afirmó que el sistema de salud en México contaba con la infraestructura médica, hospitalaria y personal de salud suficiente y capacitado para atender a los enfermos y realizar las pruebas necesarias.
Restricciones
Casi una semana después de ese anuncio, el subsecretario pidió frenar las actividades presenciales en los sectores público y privado, con el fin de reducir la movilización de personas y así disminuir la propagación del virus.
En los últimos días de marzo de 2020, la Secretaría de Salud emitió las primeras medidas preventivas oficiales a nivel nacional, anunciando el cierre de negocios no esenciales como centros comerciales, museos, gimnasios, cines, teatros, bares, discotecas, salones de fiestas, etc.
Asimismo, en la primera quincena del mes de abril, el subsecretario informó sobre la jornada nacional de sana distancia, la cual se pretendía extender hasta el 30 de mayo.
Semáforo epidemiológico
El primero de junio concluyó la jornada de sana distancia e inició la puesta en marcha del sistema de semáforo por regiones para la reapertura de actividades sociales, educativas y económicas; no obstante, la Ciudad de México ya se encontraba en semáforo rojo, una medida que implicó el estado máximo de alerta por los contagios de COVID-19.
El 25 de junio, Gatell anunció que la Ciudad de México se debía preparar para transitar a la fase naranja del semáforo epidemiológico, con lo cual comenzaría la reapertura de algunas actividades.
Sin embargo, para el mes de julio de 2020, Gatell lanzó un mensaje de alerta sobre lo que estaba ocurriendo con la reapertura de la economía en estados y municipios, pues consideró que todavía faltaba la mitad de la pandemia, incitando a la población a “actuar”, ya que argumentaba que la responsabilidad de las muertes por COVID-19 de ese entonces, no solo era responsabilidad del gobierno federal.
¿Cómo inició el 2021?
Tras superar el semáforo rojo, la Ciudad de México pasó a color amarillo a mediados de mayo, derivado de la reducción de ocupación hospitalaria y el número de pruebas realizadas.
Sin embargo, el avance le permitió a la entidad posicionarse en semáforo anaranjado a finales del mes de julio, en medio de la tercera ola de COVID-19 que presenció la Ciudad.
Actualmente, la Ciudad de México se encuentra en semáforo verde hasta el 26 de diciembre, según informaron autoridades capitalinas, por lo que los ciudadanos deberán seguir con las medidas sanitarias como el uso de cubrebocas y gel antibacterial para evitar más contagios de COVID-19.
Lo último que ha informado Hugo López-Gatell es que la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para posponer las celebraciones navideñas es en referencia, solo en el caso del repunte de casos de la nueva variante ómicron de COVID-19 en Europa, y acusó a los medios en México de sacar de contexto esta declaración del director del organismo, Tedros Adhanom Ghebreyesu.