Gabriel Quadri, excandidato a la Presidencia de México, acusó a la actual administración de generar la crisis de la contingencia ambiental mediante diversas políticas, entre estas mencionó “quemas y desmontes con fines de ampliación de la frontera agropecuaria en todo el país”. Sin embargo, expertos en incendios forestales coincidieron en que la quema intencional y agropecuaria siempre ha existido, y que los datos disponibles no necesariamente respaldan esta teoría.
En entrevista con EL CEO, Quadri explicó que esta ampliación contempla también incentivos como los precios de garantía y el programa Sembrando Vida, el cual consideró que no tiene la capacidad para discernir las tierras que han sido recientemente desmontadas.
El gobierno está transfiriendo masivamente recursos de la administración pública a subsidios clientelares para mantenerse en el poder(…) Estos subsidios incentivan la apertura de tierras al cultivo y pastoreo y por eso hemos estado viendo una nueva ola de deforestación en el país gracias a los subsidios agropecuarios del régimen
Gabriel Quadri, Socio Director, Sigea
Dante Rodríguez, especialista en Incendios Forestales, contrastó esa teoría y explicó que este año no ha presentado un número particularmente alto de incendios, por lo que existen otros factores que intensifican la frecuencia de estos en ciertas zonas del país. Entre estos factores mencionó el cambio climático, que ha elevado la temperatura y reducido las lluvias, además de otra política mencionada por Quadri: la austeridad.
La política de austeridad implicó una reducción en el presupuesto de la Conafor para la prevención y el combate de incendios del orden de 30%. Las acciones de primera respuesta contra los siniestros se ven más lentas por la falta de recursos, lo que resta eficiencia y contribuye al problema.
Dante Rodríguez, especialista en Incendios Forestales, Chapingo
Rodríguez explicó que todas las políticas de apoyo al campo a lo largo de la historia conllevan a que algunos propietarios retomen sus tierras con el uso del fuego, lo que puede provocar catástrofes si no se sigue la norma oficial mexicana de quemas controladas. No obstante, es complicado medir los impactos de estas políticas año con año.
En nuestro país el 37% de los incendios registrados por Conafor en lo que va de 2019 se deben a causas agrícolas, pecuarias y productivas (con permiso). Los incendios “intencionales” representan otro 28%, algunos de estos son quemas ilegales con objetivos productivos.
Ahí habría que analizar no sólo los porcentajes de causas de incendios, para ser objetivos, porque esta causalidad se basa en frecuencia. Realmente lo que nos diría más acerca del panorama sería la superficie afectada por incendios intencionales y agropecuarios. Las proporciones de superficie por incendio nos van a dar porcentajes distintos y muy importantes para ver el efecto (de los apoyos).
Dante Rodríguez, especialista en Incendios Forestales, Chapingo
Especialistas de la Conafor explicaron que cuentan con esos datos, pero que prepararlos tomaría mucho tiempo. Además, revelaron que sería prácticamente imposible compararlos contra los datos de años pasados, pues esta administración modificó la forma en que se establece la causa de los siniestros.
En 2018, 488 mil 162 hectáreas se vieron afectadas por incendios, mientras que en lo que va del presente año los daños han alcanzado 288 mil 641 hectáreas; debido a que se aproxima la época de lluvias, se espera que el total de este año resulte menor al del año pasado.
De los cinco estados con mayor superficie afectada, dos no se encuentran contemplados por el programa Sembrando Vida: Jalisco y Nayarit. Otros estados que sí están contemplados están entre los menos afectados: Tabasco, Sinaloa, Morelos e Hidalgo.