AT&T patrocinará a la Selección Mexicana de Futbol por 8 años, un acuerdo que calló los rumores sobre su supuesta salida del país, luego de ser criticado por Elliot Management Corporation sobre el ‘mal manejo’ de la operación en México.
La alianza es un ‘ganar-ganar’ para ambas partes, coinciden expertos. Por un lado, AT&T garantiza su permanencia en el mercado mexicano con el objetivo de aumentar su participación en telefonía móvil; mientras que la selección logra un sólido patrocinio de una marca internacional.
El patrocinio, anunciado a mediados de octubre, revela el compromiso de la compañía en ‘conectar’ a los clientes “con las experiencias que más les importan y seguir invirtiendo en México”, dijo Laurent Therivel, CEO de AT&T México.
Cabe recordar que durante la Copa Mundial FIFA Rusia 2018, AT&T fue el transmisor móvil oficial y por medio de la app “AT&T FIFA World Cup” ofreció partidos y otros contenidos.
Patrocinio, ¿ es un ganar – ganar?
Un patrocinio deportivo, desde un punto de vista técnico más que práctico debe ir de la mano de una compatibilidad de ideología, valores e identidad entre marca y organismo deportivo, con objetivos que pueden ir desde mayores ventas, mejor imagen y comunicación de marca, comentó Jorge Badillo Nieto, director de la consultoría ‘Fusion MD’.
En ese sentido, el analista de temas deportivos y negocios explicó a EL CEO que la alianza tiene claros objetivos de negocio de la marca, entre los que contempla el aumento en participación de mercado y base de clientes, aunque no tenga nada que ver con los deportes.
La alianza a 8 años entre AT&T y la Femexfut es un claro indicio de reforzar su posición y de mantenerse ‘en pie de lucha’, principalmente contra América Móvil
La Selección Mexicana tendrá grandes beneficios, al ser la propiedad y espectáculo deportivo más importantes de México, dijo el analista, una posición de privilegio que detonará contratos cuantiosos con impacto en varios otros torneos en los que participen.
Por su parte Ernesto Ávila, analista deportivo, considera que con este anuncio se dieron mensajes encontrados, de corte negativo al menos para el equipo, luego de su comportamiento en Bermudas, al ignorar a un grupo de aficionados que los siguen casi a todos lados.
Sin embargo, podría resultar positiva para AT&T, pues los torneos en los que actualmente participa tiene poca competencia selección, pensado como un equipo que va a ganar siempre, pero no con buena competencia.
AT&T le apuesta a un equipo que va a ganar siempre, lo cual es una oportunidad para lanzar promociones de la marca, pero si un día ocurre lo opuesto, será un contragolpe
Para el experto, los patrocinios tienen un gran alcance pues se reparte, en principio, en todos los clubes de la Liga Mx, además de que por la duración se garantizaron dos Mundiales de buena promoción.
Sin embargo, para Ávila, los beneficios podrían ser mayores para la Selección y no para la marca, pues duda que la percepción de la compañía mejore, sobre todo porque faltan 7 años para que México sea local.
Además, el analista cuestiona si AT&T México ‘aguantará’ 7 años con una buena capitalización.
Más allá de México
Los 8 años de patrocinio coinciden con las próximas dos ediciones del Mundial de Fútbol, el evento deportivo más esperado para los mexicanos pues el ‘balonpié’ es el deporte con más aficionados en el país, eventos que son rentables para el operador móvil, pero no solo en México.
Para Badillo Nieto, también docente de la Universidad Iberoamericana, Estados Unidos será también un elemento clave en su estrategia, pues tendría por objetivo llegar a los mexicanos que viven allí, quienes representan más del 60% de la comunidad latina que reside en aquel país.
En los últimos meses, el intercambio de descalificaciones entre el operador de origen estadounidense con sus rivales en telefonía móvil, principalmente con América Móvil, han llevado a conocer la postura de cada uno respecto a la competencia en el sector de telecomunicaciones.
Todo esto, en medio de un entorno en el que el gigante de las telecomunicaciones tiene pendientes varios asuntos que deben zanjarse en los próximos meses: la resolución sobre el ‘efecto club’, pendiente en la Corte, así como la separación funcional, si ofrece o no TV de paga y los resultados de la evaluación de la segunda revisión bienal del IFT.