El Pollo Loco es una popular cadena de restaurantes de pollo asado que opera en varias partes del mundo. Fue fundada en 1975 en Guasave, Sinaloa, y desde entonces ha crecido hasta convertirse en una franquicia con cerca de 500 sucursales en los diferentes países. 

El fundador de El Pollo Loco es un empresario sinaloense que decidió utilizar una receta de su familia para preparar pollos asados y venderlos en un local. La sucursal inicial, ubicada en el municipio al norte del estado, comenzó con la venta de algunas decenas de piezas de pollo, pero terminó convirtiéndose en el ‘imperio’ que es actualmente.

Quién es el dueño de El Pollo Loco
Fotografía: El Pollo Loco

Don Pancho Ochoa, el dueño de El Pollo Loco

El propietario de los restaurantes El Pollo Loco es Juan Francisco Ochoa, cariñosamente conocido como Don Pancho, quien también fundó la marca en 1975. Se trata de un personaje nacido en Bacayopa, Sonora, en 1944; pero que migró a Guasave, donde inició con la marca.

Antes de comenzar con los pollos, Don Pancho Ochoa abrió otros negocios. Entre ellos, estuvo una zapatería, la cual tenía un éxito moderado, pero terminó con esa pequeña empresa y decidió utilizar el local donde la tenía para abrir su primer restaurante.

En entrevista para el podcast ‘Dementes’, explicó que se inspiró después de que quiso comprar un pollo asado en otro local y no le quisieron vender porque ya se habían terminado. Con esa experiencia, tuvo la idea de crear su propio restaurante de ese giro. Según explicó, casi inmediatamente llegó la iniciativa de cerrar su zapatería y vender su producto para poner un negocio de pollos asados en su local. 

El restaurante inició con 43 pollos

El empresario explicó en el podcast que, una vez que remató todo el producto de su zapatería, logró conseguir 30,000 pesos de capital para iniciar con El Pollo Loco. Pero no dedicó todo, sino que decidió reservar la mitad por si el negocio no prosperaba, aunque confesó que tenía la ‘espinita’ de que sería un éxito.

El primer día de ventas de El Pollo Loco, Don Pancho Ochoa fue al mercado de su municipio y consiguió una caja con 25 pollos. Sin embargo, estos se vendieron muy rápidamente, así que volvió y únicamente logró obtener otros 18 pollos. De esa forma, el restaurante fue bien recibido y vendió 43 pollos en su primera jornada.

Según abundó el empresario, desde el primer día ya ofrecían sus pollos con el marinado que le da su característico sabor. Este lo obtuvo gracias a su madre, quien usaba una salsa a base de piña, naranja y otras hierbas y especias para preparar sus guisados.

El Pollo Loco se expandió hacia las 500 sucursales

Tras algunos meses de funcionamiento, Don Pancho Ochoa comenzó a expandir las sucursales de El Pollo Loco. En un primer lugar, se trató de una ampliación dentro de su zona, al poner otra tienda en Guasave. Sin embargo, empezó a ampliarse seriamente cuando sus hermanos y primos se asociaron con él para inaugurar sucursales en otras partes del país como en Michoacán, Coahuila y Nuevo León.

Para 1980, El Pollo Loco abrió su primera sucursal internacional, en Los Ángeles, California. Después de haber ‘licenciado’ franquicias a sus hermanos, primos y conocidos, cuando tenía unas 80 sucursales, el empresario decidió unificar la marca y darle identidad a todos sus restaurantes. Además, inició con el cobro de regalías, pues anteriormente otorgaba su marca ‘de buena fe’.

Tras la unificación y sistematización de la franquicia, hubo un gran crecimiento de la marca tanto en ese país como en México. Esto ha llevado a la empresa a tener casi 500 sucursales principalmente en territorio mexicano y Estados Unidos, aunque también cuenta con operaciones en Singapur y Japón.

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