La quiebra del turoperador británico Thomas Cook se podría traducir en una ausencia de hasta 23 millones de dólares para México en el último trimestre del año, de acuerdo con la Secretaría de Turismo (Sectur).

Ese hueco de ingresos se crearía si se perdieran todos los turistas que ya tenían contratado un viaje a Cancún. Este centro turístico es el único destino de la firma en el país, expuso la dependencia en un comunicado.

La secretaría previó que la quiebra de Thomas Cook no afectara el flujo de turistas hacia México, y confió en que otras compañías como TUI, Wamos o Transat cubrirán la demanda.

Sectur dimensionó la potencial pérdida frente a los ingresos anuales por turismo.

“Si sólo se toman en cuenta los 23 millones de dólares programados para el periodo octubre-diciembre, esta afectación únicamente representaría el 0.1% del total de ingresos anuales”.

La dependencia informó que el año pasado la empresa, con 178 años de historia, transportó a 112,864 pasajeros.

Entre enero y julio de este año, el grupo transportó a un total de 122,894 pasajeros por avión, agregó la dependencia a cargo de Miguel Torruco Marqués.

La temporada alta para Thomas Cook en sus vuelos hacia México era de abril a septiembre, periodo en el que se concentraba el 70% de su oferta.

Gobierno británico ayudará a desempleados de Thomas Cook

Un par de días después de la quiebra y luego de haber repatriados a miles de viajeros, el gobierno británico aseguró que quiere hacer todo lo posible para ayudar a las “9,000 personas que perdieron su empleo” en el país.

El gobierno trabaja para que los 9,000 exempleados de Thomas Cook en el Reino Unido (…) reciban el apoyo que necesitan,

declaró el ministro de Transportes, Grant Shapps, ante el Parlamento.

El liquidador confirmó a la AFP que algunos de los empleados británicos ya fueron notificados de su despido, y que otros seguían trabajando para ayudar en la repatriación.

Se prevé que la operación dure dos semanas. Un 20% de los turistas británicos fueron repatriados entre el lunes y el martes, es decir, unas 30,000 personas.

Además, Shapps confirmó que se abrió una investigación sobre las responsabilidades de la quiebra, incluida la de los ejecutivos que recibieron cuantiosas remuneraciones y primas en los últimos años a pesar del deterioro financiero del grupo.

Con información de AFP