La propagación de ómicron y otras variantes de COVID-19, así como la degradación de la seguridad aérea y una subida de los precios del petróleo, podrían ‘nublar’ el panorama de crecimiento de las aerolíneas mexicanas este año.
La variante ómicron ha generado cierta cautela, pero no ha creado tanta incertidumbre como la delta (…) creemos que durante el primer trimestre de 2022 es donde podríamos observar si bien no una caída importante, sí un estancamiento en la recuperación del tráfico internacional
dijo Brian Rodríguez, analista de Grupo Financiero Monex, en entrevista.
Aeroméxico ya se vio obligada a cancelar decenas de vuelos tras detectar contagios en parte de su tripulación. “La demora o cancelación de vuelos no es una decisión que tomemos a la ligera y siempre es el último recurso”, manifestó la compañía en un comunicado.
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Otro factor que podría impactar a las líneas aéreas sería que México tarde más tiempo en recuperar la categoría 1 de seguridad aérea que perdió en mayo de 2021, lo que se prevé ocurra durante el segundo semestre del año.
“En caso de que se extienda sí creemos que tendrá un impacto negativo para las aerolíneas mexicanas (…) la participación de mercado de las aerolíneas internacionales ha ido incrementando, respecto a las nacionales”, dijo Rodríguez.
Con la degradación, las empresas mexicanas del sector están impedidas a abrir nuevas rutas hacia Estados Unidos, que representa 70% del mercado internacional de vuelos.
Precios de petróleo, también presionan a aerolíneas
Por otro lado, el alza en los precios del petróleo, que el año pasado llegó a los 80 dólares por barril, podría presionar a las aerolíneas y eventualmente, influir en un incremento de precios, indicó Carlos Torres, analista independiente del sector aéreo.
Hay dos cosas que le afectan normalmente a las tarifas de los aviones, una es el costo del combustible que tiene una afectación directa en la operación de las empresas (…) la otra tiene que ver con la Tarifa de Uso de Aeropuerto, que trae un incremento de 6.2% para el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México
mencionó Torres.
Sin embargo, el especialista considera que las aerolíneas pueden sortear esta volatilidad; mientras que Rodríguez agregó que las coberturas que consigan las empresas podrán ayudarlas a lidiar con la situación, además, la expectativa del mercado es que el pico de precios ya pasó.
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“Creemos que mantener un precio cercano a los 70 dólares por barril o por debajo sigue siendo neutral para las empresas. Siempre que se ubique por arriba de estos niveles sí creemos que puede tener un impacto importante”, expresó Rodríguez.
Oportunidades en la recuperación
Durante 2021, las aerolíneas mostraron una recuperación tras el desplome por la pandemia, principalmente las de bajo costo, como Volaris y Viva Aerobus, que resultaron favorecidas por el incremento en el turismo doméstico y la interrupción de las operaciones de Interjet desde finales de 2020.
Ambas empresas superaron el nivel de tráfico de pasajeros prepandemia, Volaris cerró con 24.4 millones de usuarios transportados, un incremento de 11.1% contra lo registrado en 2019; mientras Viva Aerobus movió a 15.3 millones de pasajeros, un repunte de 27%.
En 2022 las empresas seguirán teniendo espacio para crecer a nivel nacional e internacional. Las dos compañías han volteado hacia Centro y Sudamérica para diversificarse e incorporar nuevas rutas.
La entrada en operación del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, donde tanto Volaris como Viva Aerobus ya confirmaron operaciones, les dará un ligero impulso extra en flujo de pasajeros, consideró Rodríguez.
Comentó que la TUA que se está generando en este complejo es bastante atractiva (alrededor de 120 pesos), lo que también permitiría dar tarifas bajas para las aerolíneas, o un margen más rentable para ellas mismas”.
