México canceló la licitación para buscar socios para Pemex en siete áreas en tierra programadas para inicios de octubre.
La cancelación del proceso CNH-A6-7 Asociaciones/2018 fue formalizada este jueves por la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), encargada de realizar las licitaciones de contratos de hidrocarburos y de “farm outs” de la endeudada petrolera.
La cancelación no se debe a que Pemex Exploración y Producción haya renunciado a los derechos de la licitación, sino a que la Secretaría de Energía, en una decisión de política energética, retiró las siete áreas del proceso por lo que no había ya materia de licitación, expuso el comisionado Sergio Pimentel durante la sesión del regulador.
Argumentó que con la previa cancelación de las licitaciones 2 y 3 de la Ronda 3 energética, y ahora con la cancelación de este proceso para buscarle socios a Pemex, no hay manera de alcanzar la meta de producción que el gobierno federal se ha fijado de 2.4 millones de barriles diarios sin el apoyo de la iniciativa privada.
“Y cuando mandamos estas señales, no hay forma de que la iniciativa privada venga a invertir porque estamos cambiando las reglas del juego”, sostuvo.
✅ 6/6 | El Órgano de Gobierno emite la resolución por la que se resuelve la cancelación de la licitación CNH-A6-7 Asociaciones/2018.
— CNH (@CNH_MX) 14 de junio de 2019
La licitación de Pemex, que requiere grandes inversiones para apuntalar una producción de hidrocarburos que decae, estaba programada para el 9 de octubre, tras ser postergada dos veces.
El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien asumió el poder en diciembre, ha cancelado todas las licitaciones de contratos que el gobierno anterior tenía en curso tras la profunda reforma energética realizada entre 2013 y 2014 y por la que se han otorgado más de 100 contratos.
La licitación de octubre era el único “farm out” de Pemex en pie y estaba enfocado en áreas principalmente con gas, del que México es muy deficitario, en Veracruz, Tabasco y Chiapas.
Las asociaciones con otras petroleras han sido vistas como una manera de ayudarla a revertir la tendencia a la baja de la producción, al atraer importantes inversiones.
La petrolera, cuya deuda financiera alcanza los 106,500 millones de dólares, recibió la semana pasada un duro golpe luego de que la agencia Fitch redujo su calificación crediticia a la categoría de basura.
Fitch argumenta que la petrolera continúa subestimando inversiones en su negocio de exploración y producción, lo cual podría llevarla en el futuro a una mayor caída tanto de reservas como de producción.
Con información de Reuters