La administración de Trump amplía sus esfuerzos para bloquear el uso de tecnología china en vehículos avanzados.

El gobierno de Estados Unidos negó solicitudes de Tesla para exenciones arancelarias a componentes clave de sus vehículos eléctricos, y además rechazó una petición similar de Uber para sus scooters eléctricos.

El 29 de mayo, la oficina del Representante de Comercio de Estados Unidos (USTR por sus siglas en inglés) rechazó la petición donde el fabricante de autos pedía la exención de barreras para la computadora y pantalla central de su Modelo 3.

El gobierno argumentó que son productos estratégicamente importantes o relacionados con el plan de Pekín ‘Hecho en China 2025’.

Las denegaciones para más de 1,000 productos chinos castigados que suman 50,000 millones de dólares ilustran un enfoque sistemático de la administración Trump para frustrar los esfuerzos del país asiático para desarrollar industrias de alta tecnología.

El gobierno de Trump sostiene que China se beneficia de robos y transferencias forzadas de propiedad intelectual de Estados Unidos.

Tesla había advertido que el aumento de las tarifas en la computadora del Modelo 3 le causa daños por el aumento de costos y el impacto en la rentabilidad.

También instó a la USTR a aprobar una solicitud de exención para su proveedor SAS Automotive USA, creador de la pantalla de visualización central para el Modelo 3.

La compañía que dirige Elon Musk no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios, pero dijo el 29 de abril que sus costos para producir sus vehículos en Estados Unidos se vieron afectados por los aranceles a ciertos componentes procedentes de China.

Los funcionarios de comercio de Estados Unidos también rechazaron el 29 de mayo las solicitudes por separado de General Motors y Volvo Cars, propiedad de chinos, para una exención a un arancel del 25% en sus vehículos deportivos utilitarios hechos en China.

Buick Envision de GM, un SUV mediano con un precio inicial de alrededor de 35,000 dólares, se ha convertido en un objetivo para los críticos estadounidenses de productos hechos en China, incluidos los líderes del sindicato United Auto Workers y miembros en estados políticos clave como Michigan y Ohio.

La oficina también rechazó una solicitud de Uber para una exención de la tarifa del 25% a sus scooters de fabricación china, que los clientes alquilan a través de su aplicación.

La estrategia de China ‘Hecho en China 2025’ se centra en 10 industrias de fabricación avanzadas estratégicas, incluidos los nuevos vehículos de energía, donde pretende ser un líder mundial. 

Con información de Reuters